Después de cuatro días bajando, el precio de la luz volverá a subir este sábado para situarse en los 190 euros por MWh. Se trata de un encarecimiento del 6,3%, según apunta el Operador del Mercado Ibérico de Electricidad (OMIE). En este sentido, la luz se pagará a un coste más elevado entre las ocho y las nueve de la noche, llegando a los 245,27 euros por MWh. Por el contrario, la electricidad será más barata entre las cuatro y las cinco de la madrugada, con 166,90 euros por MWh. Cabe decir, sin embargo, que en comparación con el sábado pasado, la factura de la luz será un 13% más económica, ya que en aquel momento el precio por MWh fue de 218,82 euros. A pesar de la rebaja de este sábado en relación con el anterior, si echamos un vistazo a la factura del mismo día del año pasado, el precio de la luz se ha disparado un 353,6%.

Sobre los valores de mercado de la electricidad, cabe remarcar que los precios de la luz en el mercado mayorista repercuten directamente en la tarifa regulada o PVPC, que regula casi 11 millones de consumidores en España. Además, son la referencia para los otros 17 millones que contratan el suministro al mercado libre. Así pues, en el caso del PVPC, el coste de la electricidad en el mercado mayorista tiene un impacto en la factura de un 24%, y el resto corresponde a los peajes y cargos que sufragan costes del sistema y de las políticas energéticas. Además, hay que sumar impuestos como el IVA o el impuesto a la electricidad, rebajado por el gobierno español para intentar paliar el impacto de los altos precios del mercado mayorista en la factura de la ciudadanía.

¿Por qué ha subido el precio de la luz?

Con todo, el aumento del precio de la luz que castiga gran parte del territorio europeo es consecuencia, entre otros, del encarecimiento en los mercados internacionales del gas, que se utiliza en las centrales de ciclo combinado y que regula el precio del mercado durante la mayoría de horas, y del aumento del precio de los derechos de emisión de dióxido de carbono (CO2).

Una App para controlar el gasto de luz

Ciertamente, en España predominan las viviendas con servicios de consumo eléctrico que comprenden los 3,3 kW y los 5,5 kW de potencia. En este sentido, son diversas las causas que encarecen el consumo de electricidad. Así pues, si quieres controlar lo que gastas, ya hay disponible una aplicación móvil que te da consejos prácticos para ahorrar en la factura de la luz. La App, que recibe el nombre de "Ahorra en Luz", permite sacar rédito de pequeños trucos que tienen un gran impacto económico. Para usarla, tienes que escoger la zona de España donde vives y seleccionar la tarifa de luz que tienes. Pues bien, si te decides a descargar la aplicación móvil, esta te avisará de en qué franjas horarias es más conveniente poner en marcha la lavadora, entre otros consejos. "Ahorra en luz" también te avisará de cuando es más barato encender la luz y cargar el teléfono, por ejemplo.

Claves para reducir el consumo

Por otra parte, nunca está de más recordar que hay una serie de pautas que tienen una gran repercusión en el consumo de electricidad. En primer lugar, comprar productos de bajo consumo para tu hogar es uno de los elementos clave que permite reducir el coste de la luz. Y es que los artefactos viejos consumen más electricidad. En segundo lugar, aunque pueda parecer molesto, es muy importante desconectar los electrodomésticos como los televisores cuando no se utilizan, ya que, aunque estén apagados, pueden consumir energía. En tercer lugar, cargar el teléfono en el lugar donde trabajas es una muy buena idea. Aunque pueda parecer que se trata de una acción pequeña, el número a veces que llegamos a cargar el teléfono móvil a lo largo del año es muy grande. Finalmente, es crucial que seas consciente de que hay que optimizar el tiempo de utilización de los aparatos electrónicos, ya que excederse del tiempo necesario acaba pagándose.

Sin duda, aunque esporádicamente se registren bajadas en el precio de la luz, actualmente vivimos un periodo de costes elevadísimos en el precio de la luz. Para comprobarlo, solo hace falta que el consumidor compare lo que está pagando hoy día con lo que pagaba hace un año. Por lo tanto, si se quiere poner remedio, es muy buena idea recurrir a pequeños trucos cotidianos que, si se convierten en habituales, permiten ahorrar.