Ya hace semanas que el descuento de 20 céntimos impuesto por el Gobierno el pasado mes de abril estaba evitando que la gasolina marcara un nuevo récord de precios a las gasolineras de todo el Estado. Ahora bien, esta semana ya ha sido imposible, ya que el precio de la gasolina ha encadenado la séptima semana consecutiva con un aumento de precios, superando los 2 euros por litro y se ha comido la subvención de 20 céntimos por litro. Concretamente, el precio medio del litro de gasolina esta semana ha sido de 2,048 euros, registrando una subida del 4% según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea. A este precio, que incluye los impuestos, todavía le tenemos que descontar los famosos 20 céntimos, si lo hacemos el precio acaba siendo, por término medio, de 1,848 euros, superando así los 1,818 euros que se registró el pasado 31 de marzo, que hasta ahora había estado el precio más de la gasolina en la serie histórica.

En el caso del diésel, el precio medio del litro, después de tres semanas de bajadas, ha vuelto a repuntar, con un alza del 3,45% con respecto a hace siete días, para situarse en los 1,916 euros. De esta manera, aunque el gasóleo sigue estando en cotas de precio muy altas, registra una evolución desde principios de marzo más favorable que el de la gasolina. Así, al aplicar la rebaja de los 20 céntimos por litro, su importe sería de unos 12 céntimos menos que al fin de marzo. Con respecto a hace un año, el precio medio del litro de gasolina es un 51,6% más caro, mientras que en el caso del gasóleo la subida de precios es del 58%.

Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 está en España ya por encima de la media de la Unión Europea, situada en 2,018 euros el litro, aunque no de la zona euro, con un precio medio de 2,061 euros. En el caso del diésel, el precio en España también vuelve a ser superior al de la media de la UE, que es de 1,908 euros, aunque está por debajo de la zona euro, con un precio de 1,942 euros. El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe al hecho que España, pese al IVA, a los mayores impuestos y a los gravámenes en el biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.

La guerra en Ucrania dispara los precios un 30%

A propósito de eso, tenemos que tener en cuenta que a raíz de la invasión de Ucrania los precios de los dos combustibles se han disparado casi un 30%. Una subida de precios que llega después de que el petróleo haya registrado también una subida de precios significativa a raíz del boicot en Rusia por parte de Occidente. Así, el barril de Brent, de referencia a Europa, cotiza este jueves por encima de los 123 dólares, mientras que el Texas americano se intercambiaba a un poco más de 121 dólares.

El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica, independiente de la del petróleo, la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. De esta manera, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de la gasolina, sino que lo hace con un decalaje temporal.