La distribuidora eléctrica del grupo Naturgy, UFD,  ha invertido cerca de 1.250 millones de euros en los últimos cinco años para mejorar su calidad de servicio y reforzar sus infraestructuras en el Estado español. Las inversiones realizadas se han centrado en innovación y aplicación de nuevas tecnologías para avanzar en la telemedida y telegestión de los puntos de suministro, en el telecontrol y sensorización de las redes; así como en el robustecimiento de las infraestructuras, con el objetivo de integrar el incremento de la generación renovable. La compañía ha informado este viernes que en 2021 invirtió 270 millones de euros a este fin, de los que 40 millones fueron destinados expresamente a la digitalización y automatización de la red; con proyectos de supervisión avanzada en Baja Tensión, actuaciones en Media y Alta Tensión, ciberseguridad y gestión avanzada de activos, entre otros.

Las inversiones realizadas en sensorización y digitalización de sus infraestructuras permitieron la mejora de la calidad del suministro eléctrico, que supera en un 35% la media de calidad en el Estado español. El indicador que mide la calidad del suministro eléctrico, el tiempo de interrupción equivalente a la potencia instalada (TIEPI), señala que la interrupción media del servicio fue de 35,9 minutos durante el año pasado, frente a los 55 minutos de media nacional. De hecho, el director general de Gestión de la Energía y Redes de Naturgy, Pedro Larrea, ha asegurado que la compañía “incorpora en sus redes casi el 20% de la generación renovable nacional y tiene un índice de calidad de suministro que se sitúa a la cabeza en España”. “De hecho, ciudades donde distribuimos, como Madrid o A Coruña, son las que tienen mejor calidad de suministro en todo el país”, ha añadido. 

Por otro lado, Naturgy también apunta que la inversión y el gasto de la empresa generan 26.000 empleos directos, indirectos e inducidos; actuando como “importante palanca” a la hora de fijar población en las zonas rurales, debido a la “importante gestión local de sus activos físicos”. Hay que recordar que UFD está presente en Madrid, Galicia y Castilla-La Mancha, donde es el mayor distribuidor de electricidad, y en Castilla y León. Actualmente, da servicio a casi 3,8 millones de puntos de suministro, a través de una red de 114.000 kilómetros de líneas de alta, media y baja tensión, manteniendo y operando las redes con el compromiso de garantizar el servicio en condiciones de eficiencia, seguridad y calidad.

La compañía también ha asegurado que continuará con su ritmo inversor durante el 2022, primando la innovación y la digitalización de las redes de distribución como pieza fundamental para la transición energética hacia un modelo descarbonizado. Asimismo, seguirá evolucionando su Plataforma Digital de Servicios como espacio donde los usuarios pueden realizar todas sus gestiones desde cualquier dispositivo, a cualquier hora y desde cualquier lugar, y como principal punto de contacto entre los diversos agentes del sistema eléctrico.