Catalunya vuelve a salir perjudicada en el rating de riesgo crediticio de la agencia de calificación Moody's. Tras las buenas noticias económicas desde el FMI y la AIReF, que han rebajado las malas perspectivas en relación al caso catalán, parece que la agencia norteamericana se mantiene impasible respecto a Catalunya, que se vuelve a quedar en un bono basura.

Situación bien distinta se ha producido en la revisión de la calificación crediticia de nueve comunidades españolas que experimentan una subida sustancial. Andalucía, Castilla La Mancha, Castilla y León, País Valencià, Extremadura, Galicia, Madrid, Murcia y Euskadi suben un peldaño.

De esta forma, Castilla y León, Galicia y Comunidad de Madrid consiguen un aprobado alto (Baa1), mientras que Castilla La Mancha, Murcia y País Valencià se quedan justo por debajo del aprobado con la subida de nota. Justo por detrás cambian Andalucía y Extremadura, con un Baa2, más que lo conseguido por Catalunya, que se queda con un bono basura (Ba3).

Según exponen desde Moody's, pese a la mejora de la calificación del conjunto del Estado, no se puede cambiar la calificación catalana porque el "creciente sentimiento independentista en Catalunya mantiene la incertidumbre en relación a la efectividad del Gobierno de España.

No todo son malas noticias para Catalunya. La demarcación de Barcelona mejora su nota, impulsada según exponen por la buena situación del Estado, al que subieron la calificación recientemente por haber sabido reaccionar ante el caso catalán.

Contradice el FMI

La revisión realizada por Moody's contradice lo expresado recientemente por el Fondo Monetario Internacional, que ha apuntado que el impacto económico del caso catalán fue menor del que predijo.

Tras el 1-O, el FMI advirtió de las graves consecuencias de la crisis constitucional en las economías catalana y española. Ahora, corrige las malas perspectivas y reconoce que el impacto no ha sido tan relevante como predijo.