La rebaja de los impuestos de los carburantes, bajo la lupa. Los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) han advertido este lunes que hay "poco o ningún margen" para bajar los impuestos de la gasolina. Se trata de una cuestión que ha empezado a plantearse después de que los precios se hayan disparado en España y por toda Europa, a causa de la guerra en Ucrania. Así se ha pronunciado también el secretario general de Gestha, José María Mollinedo, que ha afirmado que no se puede bajar el IVA a la gasolina porque España está "armonizada" con la Unión Europea, y aplica las mismas cuotas en todos los países. De hecho, Mollinedo se posiciona a favor de aumentar la tributación de los carburantes para acercarla a la media europea.

Por el contrario, Gestha propone atacar a la raíz de la dependencia energética española, por lo que pide que se aprueben incentivos fiscales al impuesto sobre Sociedades y al IRPF en la producción y uso de energías sustitutivas del gas y combustibles derivados del petróleo. También plantea ayudas directas para los sectores agropecuarios más afectados por el aumento del precio de la energía a raíz del conflicto bélico en el este de Europa. En esta misma línea, también reclama una bajada transitoria de los impuestos que pagan los transportistas, también para paliar el incremento que han tenido que asumir en el gasto de carburantes.

Escalada de precios

En las últimas semanas, el precio de la gasolina se ha disparado exponencialmente arrastrada por el alto coste del petróleo en los mercados internacionales y la guerra en Ucrania. Tanto es así que el jueves pasado por primera vez en la historia la gasolina superó los dos euros por litro, un nuevo máximo histórico. La única que superó esta cifra fue la gasolina sin plomo 98, mientras que el resto de carburantes se quedaron por encima de los 1,8 euros/litro y marcando también máximos históricos, siendo el gasóleo A el menos caro con 1,83 €/litrp. La gasolina sin plomo 95 costaba entonces 1,859 euros el litro y el gasóleo A+ subía hasta los 1,9 €/litro, según los datos del portal Diésel o Gasolina. Esto significa que si quieres llenar un depósito de 50 litros, te irás cerca de los 100 euros, prácticamente 30 euros más que hace un año.

La alternativa francesa

Ante esta situación, que se ha repetido por toda Europa, otros países ya han empezado a aprobar medidas. Es el caso de Francia, donde el precio del litro del carburante será parcialmente subvencionado por el gobierno. A partir del 1 de abril y durante cuatro meses se aplicará un "descuento en el surtidor de 15 céntimos por litro" para todos los franceses, con la intención de hacer frente a la escalada de los precios del combustible, según anunció el sábado pasado el primer ministro francés, Jean Castex, al diario francés Le Parisien. Esta medida costará unos 2.000 millones de euros al Estado, y afecta tanto a los hogares como a las empresas, y será "válida para todos los combustibles", precisó el presidente del gobierno, que pedía a las compañías petroleras y a los distribuidores dar un paso similar. "Por un depósito lleno con 60 euros, se podrán ahorrar 9", detalló Castex.