El candidato del PP por Barcelona, Jorge Fernández Díaz, ha pedido este sábado el "voto huérfano" de Unió, que no ha tenido representación en el Parlament ni en el Congreso pero que recibió más de 40.000 apoyos, y ha llamado también a los votantes de CDC que se sienten desencantados, durante una visita al Mercat d'Ordal en Sant Pau d'Ordal. El también ministro del Interior en funciones ha destacado que los votos que han ido a Unió en otros comicios son muy importantes porque no tienen ahora un partido que los pueda representar, y ha señalado que una de las corrientes ideológicas del proyecto político popular es el humanismo cristiano, junto al liberalismo, por lo que comparten raíces y, aunque no son lo mismo, son los que "más se parecen".

Por su parte, la candidata número cuatro del PP catalán en Barcelona, Dolors Montserrat, ha coincidido en la petición de rescatar votos de los de CDC que se sienten desnortados: "Les pido el voto prestado. Y lo cuidaremos", ha sentenciado, y ha añadido que se preocupan por el bolsillo de todos los catalanes y del resto de españoles. Montserrat ha defendido también que en el 26J se juega investir presidente entre el candidato de Unidos Podemos, Pablo Iglesias y el candidato del PP y presidente en funciones, Mariano Rajoy y se ha dirigido a los votantes de C's y del PSOE que no quieren que Iglesias sea presidente de España.

"Votar por carambola"

Jorge Fernández también ha llamado a los votantes de C's que teman que su apoyo pueda destinarse finalmente a investir como presidente al candidato del PSOE, Pedro Sánchez porque ha dicho que el voto a los populares es seguro y no hay que "votar por carambola", sin saber el uso que se hará a la papeleta ante un momento demasiado serio. "Cualquier parecido entre la Convergència histórica de siempre y la actualidad es una mera coincidencia", ha defendido el candidato popular, y ha añadido que la única encuesta que vale es la del 26J, y que coinciden en que el PP será la fuerza más votada, y ha pedido que no hayan vetos y líneas rojas.

Además, también ha remarcado que IU no oculta su identidad comunista, y que se contradicen al hablar de patriotismo español y a la vez defender el derecho a la autodeterminación "en Catalunya, la Comunidad Valenciana, el País Vasco y en todos lados", ya que según considera parece que quieran devolver a España a la República de Pi i Margall.

La etiqueta comunista

El ministro ha apuntado que la de comunista es una etiqueta "no muy presentable" en la Europa actual, por lo que Podemos la oculta hablando de patriotismo, y ha dicho que con la caída del muro de Berlín acabó el comunismo en la zona, aunque algunos parece que no se han enterado, ha apuntado.

Finalmente, el candidato popular ha lamentado que para la nueva política no existe la agricultura, a pesar de que hay dos millones de personas en España que se dedican a esta actividad, que representa el 13% de la economía, "más incluso que el turismo", y ha asegurado que desde el PP ha añadido que han reformado el Código Penal para que, con interdependencia de la cantidad robada, sea considerado un delito los robos en el campo.