"En un año tendremos la Hisenda catalana autonómica desplegada", ha asegurado el secretari d'Hisenda de la Generalitat, Lluís Salvadó, en la conferencia "De verdad una Hacienda propia antes de un año y medio"? organizada por el Col·legi d'Economistes. De aquí 12 meses, se prevé que las competencias propias de una hacienda autonómica estén completamente desarrolladas. Eso incluye la recaudación ejecutiva y la liquidación de impuestos propios y cedidos mediante la creación de 11 nuevas oficinas de la Agència Tributària de Catalunya, que al mismo tiempo creará organismos propios de gestión de aduanas y el catastro. Además, se ampliará el personal de 350 hasta entre 750 y 800 personas.

Ahora bien, Salvadó también ha querido dejar claro en un mensaje subliminal a la CUP que sin la aprobación de los presupuestos de 2016, no habrá lo "imprescindible" para materializar una Hacienda Propia en la previsión establecida de 18 meses. Conviene recordar que la Agència Tributària de Catalunya cuenta con una partida de hasta 48,5 millones en el nuevo proyecto de cuentas y es por eso que, según ha añadido el secretari, se cumplirá el compromiso si se disponen "de los recursos económicos necesarios, nuevos presupuestos y partidas". "La venda antes de la herida".

Conflicto entre administraciones, no entre ciudadanos

En referencia a la independencia de Catalunya, Salvadó ha reiterado la importancia del diálogo persistente con el Estado español para evitar que "el conflicto se traslade a los ciudadanos y las empresas" así como también el apoyo internacional y su potencial financiación. "En el momento de la desconexión tendremos preparado aquello imprescindible para funcionar y después lo iremos perfeccionando", ha explicado.

No se trata de cambiar "una bandera por una bandera" sino de construir un país "más digno y con una administración más cercana y participativa". Y por ello, el secretari d'Hisenda es partidario de realizar el cambio de culturas por arriba, desde la Generalitat, dando un ejemplo de buena gestión y cumplimiento de las obligaciones tributarias. El lema es corrupción 0, gestión adecuada y transparencia. 

En este sentido, Salvadó ha precisado que la estrategia para conseguir este reto "complejo y de grandes dimensiones" pasa por "agotar el recorrido de las competencias de las cuales dispone ya a la Generalitat autonómica, a la vez que ir construyendo las estructuras de una nueva Hisenda".

La primera división de las administraciones

Aunque todavía se está "a años luz de la Agencia Tributaria del Estado", se trata de jugar en "la primera división de las administraciones tributarias de las comunidades autónomas", como por ejemplo, la de Canarias. 

Y una vez esté desplegada la Hisenda catalana autonómica, Salvadó asegura que se tendrá que trabajar "en muchos frentes" para crear la hacienda propia de una futura Catalunya independiente. Unos frentes que empiezan por la ponencia conjunta en el Parlament de Catalunya para desarrollar los tres paquetes de leyes del procés constituyente, entre los cuales un código tributario, que incluye la propuesta de creación de un consejo fiscal independiente y la articulación de una oficina del contribuyente.