La viñeta que el Govern estudia aplicar como tarifa plana para financiar las autopistas de pago para sustituir el modelo actual de peajes podría costar entre 40 y 110 euros anuales, según ha explicado el secretario de Infraestructures de la Generalitat, Ricard Font. La propuesta está en fase de estudio, y todavía no se ha definido quien lo tendría que pagar o si habría tarifas diferenciadas. Sin embargo, Font ha explicado que estos precios son los que se pagan en los países de Europa donde se aplica el sistema, como Austria, y ha considerado que el precio catalán "tendría que estar en esta franja".

De esta forma, ha reafirmado que la apuesta del Gobierno por el sistema de viñeta, en oposición a la opinión que este mismo martes ha expresado el presidente del concesionario de autopistas Abertis, Salvador Alemany, que considera que es un sistema que "tiene muchas dificultades". Alemany se ha mostrado más partidario de la euroviñeta que defiende el Ministerio de Fomento, según la cual se paga por recorrido, en oposición al sistema de tarifa plana que estipula la viñeta que defiende el Govern.

Un modelo que "no nos sirve para el futuro"

Sin embargo, Font ha celebrado que Alemany coincida con el Govern en que el sistema actual "no nos sirve para el futuro" y ha subrayado que de entre las diferentes opciones que hay, ya sea financiar las vías de alta capacidad a través de impuestos, aplicando una tarifa a distancia o bien una por tiempo, el Gobierno ha escogido la segunda, que se puede aplicar "de manera fácil y rápida". También ha defendido que este sistema responde a los objetivos "de eliminación de agravios, de levantamiento de las barreras actuales, de poder ser más justo o de poder facilitar la financiación de las vías y su mantenimiento".

En cualquier caso, ha agradecido la aportación de Abertis en un momento en que se está debatiendo el sistema de futuro, y ha afirmado que "todas las aportaciones serán tenidas en cuenta". En este sentido, ha añadido que, probablemente, tanto el Govern como los diferentes actores que inciden en el debate (Abertis entre ellos) se pondrían de acuerdo en los objetivos que persiguen uno y otro modelo: la financiación de la infraestructura y que el sistema sea "más justo". A partir de aquí, "si es la viñeta o no, es el elemento final del modelo", aunque también ha reiterado, "nosotros defendemos desde el principio que la viñeta sería fácilmente aplicable".

Por otra parte, Ricard Font también ha opinado sobre la distribución de 120.000 nuevos dispositivos RondaGi para facilitar el acceso alto tramo gratuito del AP-7 entre Vilademuls y Fornells de la Selva que ha anunciado Autopistas (empresa de Abertis). Después de celebrar "el éxito" de la iniciativa, ha concluido que todo lo que sea aprovechar la tecnología para hacer más fáciles las bonificaciones "es positivo para los usuarios".