El Gobierno priorizará "preservar la ocupación" de la industria automovilística a Catalunya, que actualmente da trabajo a unas 143.000 personas, ante la revolución del sector, donde entran nuevos modelos de negocio como el vehículo autónomo o hiperconectado, y crecen fenómenos como el del coche compartido.

Después de una reunión con la comisión ejecutiva permanente del Consell Català de l'Empresa, la consellera Àngels Chacón ha asegurado que hay que actuar porque hay "puestos de trabajo que pueden peligrar" y se tiene que ver "como se reorientan" de forma "inmediata".

La automoción representa el 10,2% del PIB catalán, con más de 10.900 empresas en toda la cadena de valor, y por eso el Departament de Empresa estudia abrir líneas de ayuda directas y una oficina "de acompañamiento" en el sector, aunque para Chacón hay que trabajar con una estrategia "a largo plazo" para evitar hacer, sólo, "parches".

Concretamente, la reunión de este lunes, que ha reunido la administración pública, patronales (Fomento, Pimec) y sindicatos (UGT y CCOO), ha abordado "las líneas estratégicas del futuro del sector" y ha creado cuatro grupos de trabajo para hablar de "talento, innovación, captación de inversiones, transformación de los modelos de negocio y el ámbito energético," entre otros.

Cambio de paradigma en Europa

Para Chacón, el cambio de paradigma de la industria automovilística "afecta en toda Europa" y el "diálogo estratégico" y la "preocupación" se palpa también en estados como Alemania o Francia. "Nos importan muchísimo los puestos de trabajo", ha afirmado. Según la consellera, no hace falta "crear señales de alarma", pero sí "ser consciente" porque si no se actúa ahora más adelante quizás se tendrán que "lamentar" pérdidas de lugares de trabajo en aquellas empresas que no se hayan adaptado a las nuevas necesidades del sector.

La consellera ha admitido que se puede hablar "de ayudas directas" a las empresas, teniendo en cuenta, sin embargo, la normativa europea anti-competencia. "Tendremos que mirar como aplicamos estos recursos y los definimos estratégicamente", ha dicho, admitiendo que este tipo de ayudas pueden contribuir, en algunos casos, a "mitigar" situaciones concretas, pero hacen falta también medidas estructurales. En este sentido, los fondos podrían provenir no sólo del Govern, sino también de la Unión Europea o de conversaciones con el Gobierno.

Comparando el procés actual a la industria del automóvil con la globalización de hace unos años, Chacón ha dicho que hay que actuar por "responsabilidad". El Govern, ha explicado, analizará con los actores económicos y las empresas del sector dónde hacen falta "reconversiones" o en qué tipo de plantilla se puede potenciar una "diversificación del perfil" profesional. "Pondremos cifras, y lo cuantificaremos, ahora no las podemos dar", ha dicho, evitando dar números sobre las posibles actuaciones.

Asimismo, la consellera ha explicado que la Oficina de Transformació de la Indústria de la Mobilitat  ofrecerá "acompañamiento a las empresas" para que les comuniquen sus estrategias a corto y largo plazo para fomentar la "colaboración públicoprivada". Por ahora, sin embargo, el diseño y puesta en marcha de esta oficina todavía no está claro, aunque Chacón ha dicho que probablemente podrá tener presencia física y virtual.