Madrid y su autonomía son, hoy por hoy, la zona económica más potente de todo el Estado español, y también la que más crece, habiendo superado ya a Catalunya desde hace unos años. Las causas y los factores que lo explican pueden ser diversos, pero sin ningún tipo de duda uno de ellos es el hecho de que Madrid sea la capital del país.

Así lo ha apuntado el economista Santiago Niño Becerra, que a través de un tuit ha lanzado una reflexión interesante. "Se ha hablado muy poco, o nada, de lo que gana Madrid por el efecto capitalidad; y así seguirán las cosas. ¿Cuántos estudios e informes han leído sobre todo lo que perdió Bonn cuando dejó de ser capital de Alemania? ¿Nada, verdad?", ha tuiteado.

santiago TUIT

Y es que aunque los políticos unionistas se empeñen en relacionar el procés independentista con el hecho de que Madrid haya pasado por delante de Catalunya en potencia económica, la realidad es que los tiros van por otro sitio, precisamente por lo que señala el economista. Además, el declive económico de Catalunya no es el único que sufre el centralismo madrileño, también lo hacen otras partes del Estado con un fenómeno que ya ha sido bautizado como la 'España vaciada'.

'Efecto sede'

Así lo demuestra, por ejemplo, que de los 23.824 millones de inversión extrangera que recibió España en el 2020, tres cuartas partes fueran a parar a Madrid por el llamado 'efecto sede', que no es nada más que las empresas registren su sede en la ciudad por el hecho de que es la capital. "El efecto suyo beneficia la concentración en la Comunidad de Madrid, tanto por la manera de asignar la inversión en las filiales de multinacionales como por las operaciones sobre grandes empresas españolas con sedes en Madrid", explica la agencia especializada SIfdi.

Crecimiento del PIB

Una otro dato que apunta al buen estado de la economía madrileña es el crecimiento del 4,4% de su PIB durante el último trimestre del 2020, que es cuatro puntos por encima del crecimiento medio en el Estado (0,4%).

Otro hecho que confirma como Madrid genera lo que genera por el hecho de ser capital es su crecimiento respecto de otras partes del Estado durante los últimos 40 años. En 1980, el 14,8% de todo lo que producía España (PIB) se generaba en Madrid. Hoy es el 19,3%. Catalunya mantiene casi el mismo peso que hace 40 años (19,1%-19%), por lo que la comunidad madrileña ha absorbido parte de la actividad del resto de comunidades en un proceso de vaciado de la periferia que no parece tener freno.