La multinacional japonesa Denso, líder en componentes electrónicos para la automoción, invertirá 60 millones en los próximos años en su única planta de Europa ubicada en Sant Fruitós de Bages.  Así lo ha comunicado el presidente de Denso Barcelona, Josep Manel Gímenez coincidiendo con la celebración del 25 aniversario de la actividad de la fábrica que a su vez ha contado con la presencia del president de la Generalitat, Carles Puigdemont y del conseller d'Empresa, Jordi Baiget así como el cónsul general del Japón en Barcelona, Akilo Sagano, entre otros. La operación responde a la voluntad de la multinacional de "mantener la excelencia y la innovación" de la planta de producción catalana que cuenta con una superfície de 31.000 metros cuadrados. 

Denso no es una compañía cualquiera ya que a lo largo del cuarto de siglo que lleva en Catalunya, ha invertido 300 millones y ha empleado a más de 4.600 personas. De esta forma, no es de extrañar que Puigdemont haya agradecido a Denso que "siga apostando por Catalunya". Una confianza que sitúa la relación económica de Catalunya y Japón como "una prioridad del país". Pero Denso no tiene intención de conformarse con lo logrado y aspira a más, mucho más, por lo que Giménez ha revelado que "el sueño" de la planta pasa por alcanzar una cifra de negocios de 400 millones en 2020 e incrementar su plantilla desde los 700 a los 1000 trabajadores en 2025. Y sin ir tan lejos, la multinacional japonesa prevé aumentar las ventas de su filial catalana este mismo año. De los 270 a los 290 millones.  

Japón, más que un negocio para Catalunya

"Catalunya ha sido históricamente un buen lugar para los negocios, con una economía sólida y diversificada, que ha sabido combinar el sector industrial con otros sectores emergentes" ha asegurado, muy orgulloso, Puigdemont, a lo que ha añadido que la economía catalana está mucho más diversificada que otras regiones de Europa y sigue más que nunca "abierta a los negocios y al mundo". Buena prueba de ello es que un tercio de las empresas españolas que trabajan en Japón son de origen catalán.

Según Puigdemont, la forma de trabajar de las empresas japonesas ofrece una mirada de como los catalanes "tenemos que hacer negocios". Pero no todo son los negocios, ni mucho menos ya que los vínculos entre el país nipón y Catalunya traspasan las fronteras del mundo empresarial y se extienden a la cultura y al turismo. 

Catalunya está en racha y se ha posicionado como la primera región de Europa occidental en volumen de inversión extranjera. Tras la operación de Amazon de abrir un centro logístico en el Prat que permitirá la creación de 1.500 puestos de trabajo en tres años, Denso invierte 60 millones y consolida así su firme y histórica apuesta por Catalunya.