La consellera de Empresa y Conocimiento, Àngels Chacón, ha comparecido esta tarde en el Parlamento de Catalunya ante la Comisión de Empresa y Conocimiento para dar datos sobre el traslado de sedes empresariales fuera de Catalunya iniciados el pasado 6 de octubre con la creación del decreto ley de Rajoy que facilitaba la "fuga de empresas". La consellera ha criticado el hecho de que las empresas "recibieron llamadas del Estado" y ha aseverado que "bajo amenazas y presiones no hay libertad de empresa".

Chacón ha hecho referencia al informe presentado por el departamento de empresa y conocimiento en que asegura que los traslados de sedes "no han tenido ningún impacto económico" en Catalunya. "En ningún momento el gobierno ha ocultado ninguna información sobre los movimientos de sedes de empresas", explica a la consellera.

Delante de la lluvia de cifras del informe presentado a mediados de septiembre y explicadas por la consellera, Chacón ha reconocido que "los hechos del otoño pasado provocaron que algunas compañías aplazaran sus decisiones inversoras" sin embargo, asegura, "no tenemos constancia de proyectos que se detuvieran de manera definitiva".

Al mismo tiempo, la consellera ha asegurado que, de un lado, sólo el 0,59% del tejido empresarial catalán movió su sede de Catalunya, "correspondiendo a 2.501 empresas entre octubre del 2017 hasta el 31 de julio del 2018". "Quiero aclarar baile de cifras que ha utilizado varios medios, que algunos han utilizado los de colegio registradores mercantiles, que sólo utilizan datos agregados y no son analizables," ha criticado.

La "guerra sucia" del Estado

Chacón se ha referido a las noticias de presiones por parte del Estado, como la exclusiva del diario Ahora que asegura que el Estado retiró miles de millones de fondo de bancos catalanes e "hizo llamadas" para presionar los cambios de sedes. En este sentido, ha pedido al estado español que "sobreponga la libertad de empresa a los intereses partidistas", asegurando que "bajo amenazas y presión no hay libertad de empresa".

Así, ha explicado que "los cambios políticos generaron incertidumbre en las empresas pero sobre todo al Estado, que es el responsable absoluto de crear la incertidumbre y quien se dedicó a presionar". En este sentido, ha dicho que "tenemos conocimiento que los primeros depósitos que fueron trasladados fuera de Catalunya fueron los correspondientes a empresas publicas gestionadas por el Estado para forzar el traslado de sede social de los dos principales bancos catalanes" y de "llamadas en empresas para que cambiaran su sede por motivos ideológicos e intereses partidistas", ha dicho.

Por otra parte, la titular de Empresa ha negado la existencia "de informes ocultos" del Gobierno sobre supuestas estrategias para esconder la intranquilidad de las compañías por la situación política. No obstante, ha pedido que se revierta el decreto que facilita la fuga de sedes y ha asegurado que "no estamos a favor de ningún boicot". "Todos deberíamos de ser los mejores comerciales de Catalunya, si realmente nos creemos el crecimiento y el potencial catalán".