La DO Cava vendió el año pasado 245,1 millones de botellas, un 0,42% más que en 2015, en lo que supone un nuevo máximo histórico. Un volumen de ventas que se tradujo en una facturación global de 1.079 millones, un 2,3% más. Las exportaciones, que ya suponen dos terceras partes del total de las ventas, crecieron en el 2016 un 1,10%. A pesar de la caída de mercados clave como el alemán (-14,1%) o el inglés (-3,87%), la fuerte subida de países como Francia (20,75%), Japón (8,67%) y los Estados Unidos (7,65%), han asegurado que las ventas en terceros países hayan subido un año más.

Sobre el descenso de ventas en Alemania, que por primera vez se ha visto superada por Bélgica al frente de los países compradores, el presidente de la DO Cava, Pere Bonet, ha explicado que se justifica por la subida de precios de Freixenet, el principal exportador en este país. Con respecto al conjunto de los datos, Bonet ha valorado positivamente en el 2016 y ha remarcado como principal reto de futuro seguir internacionalizando la marca Cava y potenciar la gama premium, que actualmente supone el 11,6% del total de las ventas hasta llegar al 20%.

A la hora de valorar las ventas de cava al mercado interior, que en el 2016 cayeron un 0,80% con 86,1 millones de botellas, Pere Bonet ha destacado que el descenso es menor del previsto inicialmente, que era de un 3%, y que representa una clara recuperación con respecto a las cifras de los años 2012 y 2013 cuando se superaron por poco los 81 millones de botellas vendidas. Aquí, Bonet ha destacado que a pesar de estar todavía lejos de las cifras del 2010, cuando se superaron los 95 millones de botellas vendidas, las ventas de los tres últimos años demuestran que se ha superado lo peor de la crisis.

Un 62% de empresas exportador

Sobre las exportaciones, Bonet ha destacado que de las 235 empresas productoras de la DO, el 62% ya son exportadoras. Aunque las ventas en la UE han bajado un 1,94% por la caída de las ventas en Alemania e Inglaterra, el presidente de la DO ha puesto en valor el alza de las exportaciones en países terceros, que han subido casi un 10%, con alzas importantes en mercados como los Estados Unidos, por ejemplo. Sobre Alemania, Bonet ha explicado que el descenso de las ventas se disfrutado del alza de precios de Freixenet en los últimos años. Aquí, ha destacado que es un "mercado rígido a los incrementos", pero que la subida de precios era necesaria y que si eso se traduce en una caída circunstancial de las ventas hay que aceptarlo con normalidad.

Otro de los mercados que ha destacado Bonet es Francia, donde las ventas de cava el año pasado llegaron a los 8,9 millones de botellas, un 20,7% más. Aquí, el presidente de la DO ha puesto en valor el hecho de llegar a estos volúmenes de ventas a un productor como es el país vecino donde hasta hace pocos años las ventas eran muy pequeñas. Los 245 millones de botellas vendidas el año pasado se tradujeron en una facturación de 1079 millones de euros, 59 más que en el 2015 con un precio medio por botella de 4,56 euros.

La marca premium

Las ventas del segmento premium crecieron en el 2016 un 0,66% llegando a los 29,5 millones de botellas, lo que representa un 12% del total. Bonet ha resaltado la fuerte penetración del cava premium en países como Dinamarca (40,5%), Alemania (31%), Suecia (33,5%), Bélgica (15,4%) y Japón (12%). Pere Bonet ha destacado que, junto con la internacionalización de la marca, la mayor penetración del cava premium "es vital para la consolidación de la marca Cava". Aquí, ha señalado que el objetivo es que las ventas de esta gama lleguen al 20% en un futuro. "Tenemos que salir a ganar, no a empatar. La DO Cava tiene la capacidad y la calidad para conseguirlo", ha remachado.

El cava tradicional ha aumentado las ventas un 0,4% en el 2016 situando el volumen total en 215.600.000 de botellas, el 88% del total. Su evolución es idéntica tanto en el mercado interior como en el exterior con un crecimiento del 0,39%. Bonet ha destacado como dato interesante el incremento de las crianzas medias del cava tradicional que, en el 2016, superaron los 13,6 meses. Con respecto al cava rosado, el año pasado experimentó un incremento del 2,68% con 21,5 millones de botellas vendidas gracias a la buena aceptación entre jóvenes y nuevos consumidores.