La compañía holandesa APM Terminals ha adquirido el 100% del Grupo Marítimo TCB con sede en Barcelona por un total de 1.000 millones de dólares (911 millones de euros), según han comunicado conjuntamente el consejero delegado de Grup TCB, Xavier Soucheiron y el TCB Programme Director APM Terminal, Martijn Van Dongen. En la operación se incluyen las terminales ferroviarias y portuarias del Grupo TCB de Barcelona, Valencia, Castellón, Gijón y las internacionales (algunas todavía en fase de construcción), Yucatán (México), Quetzal (Guatemala), Buenaventura (Colombia) y Paranagua (Brasil). Además, todavía existen tres terminales con activos que suponen menos del 5% del valor de la adquisición y que están pendientes de recibir la aprobación de las autoridades pertinentes.   

"Queremos que Barcelona tenga una ingeniería líder global" han destacado desde APM Terminals que invertirá 364,4 millones de euros en los próximos años con el objetivo de actualizar y ampliar el conjunto de terminales. En total, destinarán 273,3 millones a las terminales españolas y en especial a Barcelona, donde se invertirán 182,2 millones para la automatización y ampliación del periodo de concesión. La adquisición supone un incremento del 7% en el número de empleados de APM y también del 7% en el tráfico de ubicaciones estratégicas, entre las que se incluyen Barcelona, Valencia, Castellón y Gijón. 

Adiós a TCB

El pasado mes de septiembre, APM Terminals alcanzó un acuerdo con la compañía española Perez y Cia para adquirir su participación mayoritaria del 61% de TCB y justo un mes después, los accionistas minoritarios también vendieron sus acciones, con lo que APM se convirtió en accionista único, a la espera de las autorizaciones restantes.  De esta forma, Xavier Soucheiron aseguró que "cada vez vamos a ver más APM y menos TCB" y que "no hay que tener nostalgia" en referencia a la permanencia de TCB y a su proceso de integración que acabará implicando la desaparición de la marca.  

Por el momento, el consejo de administración de TCB ha mantenido el cargo de consejero delegado de Soucheiron y su actual equipo. Queda por ver como se desarrollará el proceso de integración de una compañía como TCB que facturó 403 millones en 2015, entre un 5% y un 7% más que el año pasado en un gran grupo como APM que facturó 4.500 millones de dólares (alrededor de 4.100 millones de euros).

Fotografía de Reuters