El director general de Agbar, Josep Bagué, ha querido dejar muy claro en una conferencia en el Col·legi d'Economistes que la compañía y la administración mantienen "un compromiso mutuo". Ante las potenciales tendencias de municipalización por parte de algunos consistorios, ha defendido que "ni Agbar se puede permitir romper este compromiso ni la administración se puede permitir no tener una empresa de orden mundial". Y es que no sólo considera que "el servicio del agua ya es municipal" sino que también, la sociedad general de Aguas de Barcelona es "un referente mundial" por la gestión y el tratamiento de agua así como un "tractor" de la actividad económica.

"No tendríamos que evaluar si un modelo es bueno o no según quien lo opera sino según la calidad de la gestión que se está dando y la percepción del cliente", ha reivindicado Bagué justo antes de detallar tanto la gestión sostenible como el impacto económico. Este último año, Agbar ha rebajado un 2,5% su tarifa teniendo en cuenta que representa un 34% del importe total de la factura del agua. De la misma forma que por cada 100 euros de actuación directa, se generan 120 de facturación adicional y por cada 100 ocupados directos, se generan 295 adicionales.

Agbar realiza cada año inversiones superiores a los 17 millones en investigación e innovación con el fin de gestionar el agua de forma sostenible. Según un informe de la Cambra de Comerç, la compañía presidida por Àngel Simon generó un impacto de 1.960 millones en Catalunya en 2015. O lo que es lo mismo, 5,4 millones de euros al día. Asimismo, contribuyó al PIB catalán en 904 millones, un 0,42% del total y generó 10.202 puestos de trabajo a tiempo completo. "Los beneficios se extienden a todos los sectores y a toda Catalunya. La presencia de Agbar tiene un elevado efecto multiplicador", ha añadido.

La moda del público-privado

Las aguas de Barcelona están operadas por una empresa mixta. Pero según Bagué, "la palabra público-privado no está de moda y eso que ha sido un modelo de éxito de este país". En concreto, ha servido para una "constante actualización" de las actividades económicas así como para la construcción de infraestructuras y otros proyectos.

Bajo las carcajas del público asistente, el director general de Agbar también ha puntualizado que los catadores de agua son estudiantes y no necesitan un título universitario pero sí un protocolo de actuación. "Yo no compro garrafas de agua, El consumo medio es de 100 litros por persona al día. Yo recomendaría al Col·legi que ponga agua del grifo y un poco fresca, mejor y todo", ha concluido.