El partido de este domingo de la Superliga griega entre el AEK de Atenas y el PAOK de Salónica se ha visto cancelado después de que Georgios Komin, el árbitro del partido, anulara un gol del PAOK en el tiempo añadido por fuera de juego y esto provocó que los aficionados locales saltaran al terreno de juego para protestar la acción. A parte de los aficionados violentos, también saltó al césped el presidente del club local, Ivan Savvidis, que el cinturón llevaba una pistola, con la intención de amenazar el árbitro.

El choque enfrentaba a los dos primeros clasificados de la Liga griega y el AEK del español Manolo Jiménez afrontó el duelo como líder de la tabla, con dos puntos de ventaja sobre el PAOK Salónica que entrena el rumano Razvan Lucescu. El encuentro transcurría con empate sin goles y en el tiempo añadido Varela llevó el balón a la red, pero el árbitro, Georgios Kominis, señaló fuera de juego e invalidó el tanto que hubiera situado al PAOK en el liderato de la competición. La decisión exaltó a los seguidores, pero también a los jugadores locales, que cercaron al juez del encuentro, y al cuerpo técnico, que saltó al terreno de juego para acentuar su protesta.

Como se puede ver en el vídeo, sobre el césped irrumpió, excitado y molesto por la decisión del árbitro, el presidente del club, Ivan Savvidis, que se dirigió al árbitro portando una arma. La situación tensa se prolongó durante varios minutos. Los jugadores del AEK se marcharon al vestuario, que poco después logró alcanzar también el árbitro. En pleno caos, los futbolistas del PAOK permanecieron en el campo a la espera de que se reanudara el partido.

Antes del inicio del choque, se produjeron varios altercados en las proximidades del estadio Tumba y la policía tuvo que intervenir ante la actitud de los seguidores radicales de Salónica, que lanzaron objetos de todo tipo a los miembros de la seguridad.

Las tensiones se producen justo cuando el Comité de Apelaciones de la Federación Griega de Fútbol (EPO) acaba de devolver al PAOK los tres puntos que le fueron retirados tras el ataque por parte de un aficionado al entrenador del Olympiacos, el español Oscar García Junyent, el pasado 25 de febrero.

Orden de detención

La policía griega ha emitido este lunes una orden de detención contra el presidente del PAOK de Salónica, Ivan Savvidis, a raíz del incidente durante el partido contra el AEK de Atenas para llevar el arma. La orden también se refiere a otras cuatro personas, probablemente sus guardaespaldas, que invadieron el campo de juego junto a Savvidis.

Se deben "tomar decisiones difíciles en consulta con la UEFA", dijo el viceministro de Cultura y Deportes griego, Yorgos Vassiliadis, refiriéndose a una posible suspensión de la Liga. "Lo que vimos es un ataque al honor del fútbol griego. Dañan al club ya los seguidores del equipo. Que alguien entre al campo con una pistola en la mano es una provocación inadmisible, independientemente de lo que haya pasado", afirmó por su parte Panos Skurletis, el ministro del Interior griego.