Ernesto Valverde ha llegado al Camp Nou para quedarse. El entrenador número 57 de la historia del Barça ha vivido el primer día como técnico blaugrana y ha estado acompañado de diferentes actos protocolarios de presentación.

Con un ademán atrevido, valiente y elegante, el Txingurri ha hecho con fuerza su primer paso en el Camp Nou. "Quiero que el Barça sea más grande de lo que es", ha afirmado con contundencia. Su aventura como entrenador blaugrana sólo ha hecho que empezar, pero el extremeño tiene claro que no quiere hacerse pequeño ante la inmensidad, hoy exagerada por la soledad en las graderías y el imponente Sol que le ha dado la bienvenida, del estadio que será su nueva casa durante los próximos años.

Cóctel de elegancia y sencillez

El trabajo como forma de agradecimiento: el nuevo entrenador del Barça no conoce otra forma de devolver la confianza que han depositado en él. Se siente cómodo con las fotos y los diferentes actos de presentación protocolarios, pero su sencillez se palpa en las ganas de competir más allá de cualquier cosa. Él está aquí para responder a las expectativas sobre el terreno de juego y para hacer realidad "los sueños de los culés", como ha explicado el presidente Josep Maria Bartomeu.

Mostrando su faceta más divertida cuándo ha estrenado la nueva camiseta del equipo, sobre la cual ha expuesto "que no le cabría y, por lo tanto, no se la podría poner", ha podido contemplar la nueva línea curva en el nombre de los futbolistas y la tipografía unificada que la Liga Santander aplicará de cara la temporada 2017/18. Y lo ha hecho precisamente el mismo día que la elástica salía a la venta en la tienda oficial del club.

Ernesto Valverde y Bartomeu camiseta presentacio Sergi Alcàzar 03

Valverde también ha tenido tiempo de sentarse por primera vez en el banquillo culé. Ya lo había hecho unas cuantas veces como dirigente del Espanyol, el Valencia, el Villarreal y el Athletic Club, pero nunca bajo la etiqueta de técnico local. Y sin esconder su felicidad, el Txingurri no ha querido gustarse; la hora de la verdad todavía no ha llegado, y allí ya se pasará muchos minutos en un futuro próximo.

La prensa, el rival más complicado

En el Auditorio 1899 ha tenido que hacer frente al gremio con el que Luis Enrique no acabó de congeniar durante sus tres años a las órdenes del primer equipo del Barça. Los periodistas han guardado las cámaras y han sacado los micrófonos para ponerlo a prueba, aunque antes han escuchado las palabras de Jordi Mestre y Robert Fernández y presenciado algunos de los 8 goles que marcó durante sus dos temporadas en el club.

Ernesto Valverde banquillo Sergi Alcàzar 04

Para él, el reto mayor "es el de saber lidiar con las ruedas de prensa". Y es que, como entrenador del Barça, las preguntas a responder en el primer contacto con los periodistas no sorprenden: estilo de juego a desarrollar, futuros fichajes, entrenar a jugadores como el tridente o Andrés Iniesta, tratamiento del filial, etc. Como era previsible, ha sido el centro de atención, y es que de las 32 cuestiones sólo ha habido una a Robert Fernández y ninguna hacia Mestre; el resto, dirigidas a él. Sin embargo, no ha querido ni evadirlas ni dejar de lado la elegancia que le otorgaba la americana y la corbata grises que vestía a la hora de contestarlas.

Empieza la etapa Valverde al Barça. La presentación ya es historia y ahora toca ponerse el traje de trabajo para confeccionar la nueva plantilla blaugrana y prepararse para competir por todo. La pretemporada lo recibirá con un amistoso y una Supercopa contra el Real Madrid. No será fácil, pero tampoco lo ha sido para los 56 predecesores en el banquillo culé. "El reto es mayúsculo".