El partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey se calienta por culpa de los insultos. La afición del Valencia, que esperaba a la llegada de los dos equipos en los alrededores del estadio de Mestalla, ha empezado a gritar 'puta Barça y puta Catalunya', tal y como sucedió en el partido de Liga que se disputó el pasado 26 de noviembre en el mismo estadio.

El campo del Valencia es especialmente hostil para el Barça. Los blaugrana no pierden en Mestalla desde el 2008. Un dato que enciende los ánimos de una afición que ha vuelto a mostrar su peor cara. Incluso, unos cuantos seguidores han reproducido los vergonzantes cánticos contra Gerard Piqué y su familia que se escucharon en el campo del Espanyol.

El Barça es plenamente consciente de que el factor ambiental jugará un papel determinante en esta eliminatoria de Copa. El Valencia rebajó el precio de las entradas para incentivar que las graderías de Mestalla presenten un aspecto inmejorable y ayudar así a los hombres de Marcelino García Toral a remontar el resultado adverso con el que salieron del Camp Nou (1-0).