En el FC Barcelona, los movimientos bajo los palos han tomado un giro definitivo. Tras meses de convivencia tensa, Marc-André ter Stegen ha salido reforzado mientras Wojciech Szczęsny prepara ya su salida del club. Lo que comenzó como una solución de emergencia, acabó convirtiéndose en un duelo silencioso que finalmente ha decantado la balanza a favor del guardameta alemán.
El partido de vuelta contra el Inter de Milán, con un marcador de 4-3 que dejó al equipo al borde del colapso, ha sido el punto de no retorno para el futuro de Szczęsny. A pesar de que la línea defensiva fue duramente criticada, las miradas se centraron inevitablemente en el portero polaco, que encajó un total de siete goles en la eliminatoria. Desde entonces, la confianza del cuerpo técnico se ha ido desvaneciendo.

El Barça no renovará a Szczęsny
Fuentes internas apuntan que el club ya ha tomado la decisión: no se renovará el contrato del ex de la Juventus, que expira este verano. Aunque llegó para cubrir la lesión de larga duración de Ter Stegen, lo cierto es que nunca ha terminado de convencer. Su rendimiento ha ido de más a menos en las últimas semanas, dejando más dudas que certezas y generando incertidumbre en momentos clave.
Pero la cuestión no es solo deportiva. Es una evidencia que Ter Stegen no ha llevado bien la competencia. Su discurso público en las ´últimas semanas ha ido enfocado en presionar al polaco. El alemán le vio las orejas al lobo tras las actuaciones positivas de Szczęsny y no ha perdido el tiempo para marcar perfil. Sobre todo teniendo en cuenta que los jugadores lesionados no suelen hablar, y Ter Stegen no ha dejado de hacerlo en cuanto ha podido. Lejos de aceptarlo como apoyo, vio en Szczęsny una amenaza a su estatus dentro del equipo. Y finalmente, esa presión ha surtido efecto.

Iñaki Peña tampoco seguirá
En paralelo, Iñaki Peña también dirá adiós al club, lo que deja al Barça con la tarea urgente de fichar un nuevo guardameta suplente. La prioridad es encontrar un perfil discreto, fiable y que no entorpezca la figura de Ter Stegen, quien recupera así su lugar como líder absoluto en la portería, a la vez que se hace una apuesta de futuro.
Por su parte, Szczęsny, de 35 años, baraja la posibilidad de poner punto final a su carrera. Su idea inicial era continuar un año más en la élite, pero ante la falta de oportunidades y el desencanto vivido en el Barça, la opción del retiro definitivo vuelve a tomar fuerza.