Antonio Rüdiger ya estaba advertido por Carlo Ancelotti, que le dejó muy claro que no iba a ser sencillo asentarse en el Real Madrid. Tenía que ganarse el puesto como todos los jugadores, y para ello debía de rendir a un buen nivel en los entrenamientos, y también aprovechar sus oportunidades. Pero el alemán estaba convencido de que sería intocable desde el primer día, comenzando por la Supercopa de Europa, donde se enfrentaban al Eintracht de Frankfurt.

Sin embargo, y para sorpresa del ex de Chelsea, AS Roma, VFB Stuttgart y Borussia Dortmund, tuvo que comenzar desde el banquillo. Una cosa que no le hizo ni pizca de gracia, pues Florentino Pérez le convenció para que firmara su contrato asegurando que sería un fijo en el once inicial. Pero menos gracia le hizo entrar al terreno de juego cuando el resultado estaba decidido, pues reflejaba un dos a cero en el marcador, y solamente quedaban unos minutos para que sonara el pitido final.

Considera que fue una humillación, y mientras el resto de sus compañeros celebraba la conquista del trofeo, él no pudo contener el enfado. Obviamente recogió la medalla y fue uno más durante los festejos, pero su expresión cambió cuando se dirigió al túnel de vestuarios. Porque se mostró bastante decepcionado, lo que obligó a que su compatriota Toni Kroos tuviera que hablar con él para tranquilizarle.

Aunque no fue el único que se acercó. Davide Ancelotti, hijo de ‘Carletto’, y que forma parte del cuerpo técnico, trató de animar a Rüdiger, pero no lo consiguió. Fue incapaz de hacer razonar al germano, y no solo eso, sino que tuvo una dura bronca con él, pues la respuesta que el futbolista le dio no fue la adecuada, y se atrevió a subir el tono de voz en exceso. El italiano, lejos de quedarse callado, le reprochó el gesto, y protagonizaron una enganchada que puede tener consecuencias.

Porque no es descartable que acabe siendo castigado, y los próximos partidos los vea también desde fuera del terreno de juego.

Aurelien Tchouameni también debutó con el Madrid

Junto a Rüdiger, ingresó al campo Aurelien Tchouameni, que también hizo su debut en partido oficial, y le bastaron unos minutos para celebrar su primer título. En su caso, tampoco se fue demasiado satisfecho, pero no ocasionó los mismos problemas, pues entiende que su adaptación al Madrid será un poco más lenta.

Además, no lo tendrá sencillo, viendo el sensacional nivel que mostró Casemiro, que fue uno de los MVP del duelo.