El FC Barcelona sigue trabajando en la planificación de la próxima temporada, y una de las posiciones que más preocupan en los despachos es la portería. Aunque Wojciech Szczesny ha cumplido con nota durante su etapa como azulgrana, no está garantizada su continuidad más allá del verano. El polaco, que llegó para reforzar temporalmente al equipo tras la lesión de Ter Stegen, valora la posibilidad de salir, y en el club ya se preparan para buscar un relevo.
Hasta ahora, Joan García, portero del Espanyol, era el gran favorito para ocupar ese puesto. Sus actuaciones con el conjunto perico, especialmente en los derbis catalanes, han llamado la atención del Barça, y su juventud y proyección lo convertían en una opción atractiva. Sin embargo, hay dos obstáculos importantes: su cláusula de rescisión de 30 millones de euros y su pertenencia al eterno rival ciudadano, lo que dificultaría cualquier operación por el componente emocional y político.
Ante este panorama, Deco ha activado un plan B que podría acabar siendo un auténtico acierto: Leo Román.
Leo Román, una opción de presente y futuro

El guardameta del RCD Mallorca, de 24 años, se ha ganado un sitio en el radar del Barça gracias a varias actuaciones de alto nivel en partidos clave, incluyendo sus brillantes intervenciones ante el Real Madrid y el propio Barça. Aunque no ha sido titular indiscutible durante toda la temporada, cuando ha jugado ha dejado una sensación inmejorable: seguro por alto, rápido en los reflejos y con una buena salida de balón, características que encajan a la perfección con el estilo que quiere Hansi Flick.
El punto más atractivo es, sin duda, su coste. Leo Román tiene una cláusula de rescisión de 10 millones de euros, lo que lo convierte en una opción muy asequible en comparación con Joan García. Y en caso de negociar directamente con el Mallorca, podría incluso rebajarse esa cifra.
Además, el joven portero vería con muy buenos ojos un salto a un club como el Barça, aunque sea inicialmente para competir como segundo portero. La idea en los despachos del Camp Nou es clara: traer a alguien con potencial para que, en el futuro, pueda tomar el relevo de Ter Stegen, cuya etapa en el club comienza a acercarse a su fase final.
Encaja en el modelo de Flick
Hansi Flick ya ha dado algunas directrices sobre qué tipo de portero necesita. Quiere alguien que pueda adaptarse rápidamente a la dinámica del equipo, que acepte un rol secundario al principio, pero que tenga nivel suficiente para asumir la portería cuando se necesite. Leo Román cumple con ese perfil, y su margen de crecimiento es alto, algo que valora mucho el cuerpo técnico.

Deco ha recibido buenos informes del área de scouting, y el fichaje cuenta también con el visto bueno del entrenador alemán. No hay una decisión definitiva aún, ya que todo depende de la continuidad de Szczesny, pero en los despachos ya trabajan en la sombra para cerrar la operación en cuanto haya luz verde definitiva.
Una apuesta de futuro
Con finanzas ajustadas y necesidad de tomar decisiones inteligentes, Leo Román representa una de esas oportunidades de mercado que el Barça no puede dejar escapar. A buen precio, con potencial para crecer y experiencia en LaLiga, su fichaje sería una jugada estratégica.
Si Szczesny finalmente dice adiós, el futuro de la portería azulgrana podría tener nombre propio: Leo Román.