El París Saint-Germain se las prometía muy felices cuando logró cerrar el fichaje de Sergio Ramos sin tener que pagar ninguna cantidad en concepto de traspaso al Real Madrid. Tuvo que hacer frente a una suculenta prima de fichaje y atender los 2 años de contrato que exigía el central andaluz, pero a cambio se hacía con los servicios de uno de los mejores defensas de la última década.
Lo extraño es que el Real Madrid no pusiera ni un solo impedimento, hasta destilarse de que Sergio Ramos no se había ido, sino que le habían echado, pues él quería renovar su contrato. Al Khelaïfi no lo vio así y se sintió victorioso.
Nasser Al Khelaïfi, presidente del París Saint-Germain / Europa Press
Ramos sigue sin debutar
No han pasado ni 4 meses desde que el PSG anunció el fichaje de Sergio Ramos y en la capital francesa ya se tiran de los pelos. El central todavía no ha podido debutar y parece que la espera va para largo. A todo ello, la relación se ha enturbiado por unas informaciones en las que se aseguraba que Ramos se negó a debutar contra el Olympique de Marsella, al entender que los médicos del PSG le estaban forzando por presiones y no porque realmente consideraran que el central estaba listo para jugar.
La filtración, a medios afines a los mandatarios del PSG, acabó con la paciencia de Sergio Ramos, que ha pasado a estar muy molesto al ver como en París ya se habla de una posible salida, sea al Newcastle o al Inter de Miami, operaciones que el jugador ni contempla, por lo que no deja de ser una manera de presionarle para que juegue ya.
Sergio Ramos, junto a Leo Messi, en la presentación del PSG 2021/22 / EFE
Ramos piensa cumplir su contrato en París
Finalmente, Sergio Ramos y su hermano y representante, René, ya le han hecho saber al PSG que el jugador solo saltará al césped cuando esté totalmente recuperado de sus molestias en el sóleo, pues una recaída podría ser muy grave. Y no solo, pues el PSG ya sabe que Ramos no tiene la más mínima intención de moverse de París hasta el 30 de junio de 2023, día en el cual finaliza su contrato. El futbolista lo tiene claro, por lo que ninguna presión le hará cambiar de opinión.
Al PSG, pues, no le queda más remedio que asumir que muy probablemente cometió un grave error al fichar a Sergio Ramos e intenta recuperar las relaciones con el futbolista. Y es que no les queda más remedio que asumir que hasta el verano del 2023 Ramos estará en la plantilla, por lo que lo mejor es que consigan que vuelva a rendir al máximo nivel posible.
Imagen principal: Sergio Ramos, durante su presentación como nuevo jugador del PSG / Europa Press