En medio del auge del movimiento Black Lives Matter en la NBA, parece difícil de creer que alguien se atreviera a hacer un comentario racista en la burbuja de Orlando, pero así ha sido. Ha sucedido en el partido de los Dallas Mavericks contra Los Ángeles Clippers, donde los primeros han perdido por 123 a 130. Montrezl Harrell, el pívot de los Clippers, ha insultado a Luka Doncic, hecho que no ha dejado indiferente a nadie.

Los dos jugadores han mantenido una disputa desde el principio del encuentro. En el primer cuarto, Harrell se ha girado para gritarle al base esloveno "bitch ass white boy", lo que podríamos traducir como "puto chico blanco". Una conducta completamente inaceptable si tenemos en cuenta que la gran mayoría de los jugadores llevan mensajes en la espalda como protesta contra el racismo.

Este no ha sido el único momento en que los jugadores se han dirigido unas palabras. En una acción del juego donde el pívot de los Clippers se ha caído al suelo, Doncic le ha dicho que dejara de tirarse, lo que ha incendiado todavía más los ánimos de Harrell.

No hay ni que mencionar que los insultos que tienen como base el color de piel no están permitidos, ni de blancos a negros, ni al revés.

Susto de Doncic

La mala noticia también ha venido de parte del base de los Mavericks. Al final del tercer cuarto, Doncic se ha torcido el tobillo y ha quedado tirado en el suelo en la pista mientras el juego seguía. Aunque las imágenes no presagian nada bueno, el propio jugador se ha encargado de tranquilizar a la afición.

"No es tan malo. He tenido suerte de que fuera mi tobillo izquierdo y no mi derecho", explicó en la conferencia de prensa, en referencia al hecho que ya ha tenido varias lesiones en el pie izquierdo. Después del partido el base abandonó las instalaciones por su propio pie pero cojeando visiblemente. Ahora sólo queda esperar al resultado de la resonancia magnética para ver cuál es la dimensión de su lesión.