Pep Guardiola ha vuelto a hablar sobre su futuro en el mundo del fútbol dejando claro que si termina dejando las banquetas no acabará presidiendo el Barça. "Nunca seré presidente del Barça, para eso está Gerard Piqué". Contundente y sin pelos en la lengua para dejar claro que su futuro en el caso de dejar de ser entrenador no es para dirigir el club blaugrana.

Todo viene a raíz de unas declaraciones del técnico italiano Fabio Capello que había asegurado que las recientes declaraciones del entrenador de Santpedor sobre su corta carrera como técnico abrían el camino a la presidencia del Barça. Sin embargo, Guardiola ha descartado la posibilidad de acabar siendo el máximo dirigente blaugrana en un futuro, pues el técnico tiene claro que esta posición está asignada a Piqué. Y no es la primera vez que Pep lo elogia en este sentido; a finales de noviembre ya aseguró que lo votaría si el central se presentara a los comicios.

Tampoco es el primero que lo hace. El exjugador del Barça, Xavi Hernández, ya dijo que Piqué "tiene capacidad de liderazgo" y "consigue todo el que se propone" al mismo tiempo que afirmaba que ejercer de entrenador del Barça con Piqué de presidente "es soñar mucho, pero sería una ilusión y es algo que me ronda por la cabeza".

Además, Tal como hizo en la victoria en el pasado partido de Premier League, Guardiola aseguró que no tardará demasiado en retirarse. "No entrenaré cuando tenga 60 años, pero ahora tengo 45. Estoy en un lugar perfecto para seguir trabajando. En el futuro quiero hacer algo más en mi vida. Empecé muy temprano en esto del fútbol".

Guardiola ahora está en su primer año comandando el City y ha confesado que no ha llegado para cambiar nada. "La gente que creía que vine a cambiarlo todo estaba equivocada: he venido a mejorar y ayudar a mi equipo, a adaptarme, no cambiará nada". Además, también ha reconocido que tal vez las palabras del otro día en referencia a que estaba llegando al final de su carrera como entrenador fueron "inapropiadas".