Pep Guardiola asume que su etapa en el Manchester City ya está llegando al final. El siguiente verano se cumplirán 10 años desde su llegada, una década en la cual ha conseguido hacer historia, y conquistar absolutamente todos los títulos posibles. Pero el curso anterior las cosas ya se empezaron a complicar, y los resultados fueron absolutamente desastrosos, como demuestra el hecho de que no conquistaran ningún título, por primera vez en mucho tiempo.
Fueron eliminados por el Real Madrid en Champions League, en la FA Cup perdieron sorprendentemente en la final contra el Crystal Palace, y en la Premier League sufrieron para finalizar entre los cinco primeros. Por esta razón, en verano invirtieron una gran cantidad de dinero en remodelar la plantilla, fichando a cracks como Gianluigi Donnarumma, James Trafford, Tijjani Reijnders, Rayan Cherki o Rayan Aït-Nouri, y dejando salir a Kevin de Bruyne, Ederson Moraes o Manuel Akanji.
El técnico de Santpedor creía que era necesaria una revolución en el vestuario para recuperar el espíritu competitivo, aunque por ahora, todo sigue sin funcionar. Así queda demostrado con el pésimo inicio de campeonato que están firmando, con una única victoria en las tres primeras jornadas de liga, y dos derrotas, que han provocado que se alejen del liderato. Y puede acabar dejando el Etihad Stadium antes de 2027, cuando expira su contrato.
Si Guardiola no consigue encontrar una solución, no tendrá ningún problema a la hora de dimitir, ya que no quiere irse como villano, y prefiere ser recordado por la afición ‘skyblue’ como un héroe. Y ya se ha hablado de su próximo desafío, especulándose sobre la posibilidad de que se convierta en seleccionador de algún país, o se tome un año sabático. Pero un posible regreso al Barça está totalmente descartado por parte del exentrenador del Bayern de Múnich.
Da por finalizada su etapa en el Camp Nou, y a pesar de que Joan Laporta tenga una magnífica relación con él, Pep no quiere saber absolutamente nada sobre este tema.
Laporta ofreció a Guardiola un cargo en la directiva
En el Barça no tienen la intención de prescindir de Hans-Dieter Flick, con quien están muy satisfechos, pero Laporta había ofrecido a Guardiola un cargo importante dentro de la dirección deportiva, colaborando con Deco.
Una idea que Pep no tardó en rechazar, pues ya ha dejado claro en múltiples ocasiones que no tiene intención de vivir una segunda etapa en la entidad azulgrana.