El Barça ha completado sus primer amistoso de pretemporada y hay un nombre que ya empieza a sonar con fuerza en los pasillos del vestuario: Jofre Torrents. El joven lateral izquierdo, de solo 18 años, ha sido una de las grandes sensaciones en estos primeros días a las órdenes de Hansi Flick y ya muchos en el club le ven compitiendo por un puesto en el primer equipo.
Jofre Torrents destaca
En el primer partido de preparación, Jofre jugó la segunda parte dejando grandes detalles y demostrando que su desparpajo, velocidad y proyección ofensiva no tienen nada que envidiar a los laterales más consolidados. Por delante de él en la rotación estaba Gerard Martín, el que fue el suplente habitual de Alejandro Balde durante la pasada campaña, pero solo entró en la recta final del encuentro.

Este detalle no ha pasado desapercibido en el vestuario, donde voces como las de Pedri, Gavi o Ferran Torres ya comentan lo que muchos piensan: Jofre Torrents puede quitarle el sitio a más de uno. Su rendimiento, actitud y nivel físico están por encima de lo que se espera de un jugador de su edad, y ha llegado con la ambición de convencer al nuevo técnico.
Flick, que quiere una plantilla competitiva y con opciones reales en cada posición, ya ha mostrado interés por seguir observando a Jofre de cerca. Aunque en principio no está previsto que haga el salto definitivo al primer equipo este verano, su rendimiento podría cambiar los planes del club. Incluso Balde, titular indiscutible, sabe que tendrá que rendir al máximo si no quiere verse cuestionado en algún momento de la temporada.
En el Barça consideran que Jofre es un cohete. Su capacidad para recorrer toda la banda, su precisión en el pase final y su implicación defensiva lo convierten en un lateral moderno, ideal para el sistema de Flick.

De seguir así, no sería extraño que Flick empiece a darle minutos también en partidos de mayor exigencia. Con su irrupción, la competencia en el lateral izquierdo se enciende, y nombres como Gerard Martín podrían verse relegados a un segundo plano. El mensaje en el vestuario es claro: Jofre Torrents ha llegado para quedarse… y viene a por todo.