Los malos resultados del Barça en los últimos partidos podrían tener consecuencias no solo en el futuro más inmediato, con la pérdida del liderato en su grupo de Champions League o la caída en posiciones en la lucha por la Liga, sino también a futuro. Estos podrían afectar a lo tentador que puede ser el equipo blaugrana para posibles nuevos fichajes.
Ante la mala situación económica del club, Xavi Hernández ha sido clave a la hora de convencer a algunas de las últimas incorporaciones para que se uniesen al club blaugrana. El respeto que los futbolistas tienen a una leyenda del fútbol, además de su capacidad para explicar su proyecto, han sido necesarios para que jugadores como Ilkay Gündogan, Jules Kounde o Robert Lewandowski se hayan unido a las filas del técnico egarense. Sin embargo, el mal rumbo del equipo podría haber acabado con este as bajo la manga.
Nico Williams, el primero en rechazar a Xavi
Uno de los primeros ejemplos de esta posibilidad es Nico Williams. El extremo del Athletic Club de Bilbao está en el punto de mira de los principales clubes de Europa, ya que acaba contrato el 30 de junio de 2024. El Barça, igual que el Real Madrid o los principales clubes de la Premier League, se había intentado acercar al jugador para ligar su futuro en el Camp Nou una vez finalizase su vínculo con su actual club, pero parece que esta no será una posibilidad.
Según Sport, el internacional español está cerca de alargar su contrato con el Athletic Club. Por lo que Nico se convertiría en uno de los primeros jugadores que ha rechazado el proyecto propuesto por Xavi para prolongar su estancia en San Mamés.
Una renovación con matices
Aunque la renovación descartaría de la puja a equipos como Madrid o Barça, que estaban interesados en el jugador más por ser una oportunidad de mercado que por necesitar refuerzos en el extremo, tampoco serviría par asegurar el futuro del jugador. En el conjunto vasco son conscientes de que Nico no seguirá los pasos de su hermano y se acabará marchando, pero no sin antes dejar un beneficio económico.
El jugador tampoco quiere irse de malas formas del club que le ha formado, por eso está dispuesto a firmar un nuevo contrato con una cláusula a la baja que le permita salir en el caso de que algún club presente una oferta. De hecho, el Aston Villa ya estaba dispuesto a hacer una oferta de traspaso este mismo mercado de invierno para adelantarse a sus competidores. Pero si Nico renueva, los villains se desentenderían de su contratación.