Álvaro Morata fue uno de los protagonistas del Barça-Chelsea, a pesar de jugar sólo 24 minutos. El delantero, criado en las categorías inferiores del Real Madrid, entró en el campo cuando el partido ya estaba resuelto.
Su pasado blanco provocó que una buena parte del Camp Nou le dedicara una sonora pitada cuando sustituyó a Olivier Giroud. Además, el '9' del Chelsea fue víctima de algunos de los cánticos de la gradería. "Qué malo eras, Morata qué malo eras", gritó a un sector del estadio que ya celebraba la clasificación para los cuartos de final.
El delantero madrileño no encajó bien los cánticos y reaccionó tocándose los genitales en reiteradas ocasiones mientras defendía un córner, tal y como captaron las cámaras de Atresmedia.
Atresmedia
Morata, de 25 años, abandonó el Madrid el pasado verano a cambio de 66 millones de euros en busca de oportunidades para brillar en Europa. A pesar de la millonaria inversión, el entrenador del Chelsea Antonio Conte prefirió a Giroud, otro delantero, para jugarse el futuro en la Champions.