Después de casi una semana abriendo con Messi cada día y del disgusto pasado y un poco más digerido, detengámonos y reflexionemos. Al principio vivimos la incertidumbre de si se iba o se quedaba. Más tarde, publicábamos la noticia que muchos nunca habrían querido leer: "Oficial: Leo Messi ficha por el Paris Saint-Germain". Y no es sólo cosa nuestra, consultando el resto de medios, veías que todos estaban igual. Es la noticia del año. Messi nos ha hecho olvidar momentáneamente que vivimos en pandemia, que nos encontramos en situación de emergencia climática o que el mundo sigue girando y que siguen pasando un montón de hechos noticiables. Para algunos, sin embargo ―¡y sois muchos!―, solo existe Messi y lo que vendrá a partir de ahora.

¿Por qué Messi ha paralizado el planeta?

"El ser humano, como ser social, necesita formar parte de un grupo y da igual si es de una nación, de un grupo de amigos o de un equipo de fútbol, que puede ser un hobby o ir mucho más allá. La diferencia está entre las personas que se identifican con el grupo y las que no", responde la psicóloga Mayte Sánchez a la pregunta de por qué algunos lo viven con tanta emoción e intensidad y para otros, en cambio, les da absolutamente igual.

Messi despedida II EFE

Messi llora su adiós con el Barça / Foto: EFE

Al identificarse con un equipo, todo el organismo se siente parte del grupo, reforzando la identidad y se arraiga basándose en esta identificación, expone la psicóloga, "ser parte de...". Una identificación que hace que todo tu ser se proyecte en el grupo y, a la vez, tu organismo produzca sensaciones externas o internas similares a la identificación con una familia, una nación, una cultura o una profesión, por ejemplo.

Sánchez considera que el fútbol tiene todas las cualidades que hacen despertar, más que otro deporte, esta identidad. "Es un deporte en el que casi todos los niños y niñas han participado activamente, tiene unas reglas fáciles de entender, hecho que significa que el grado de implicación es mucho más fácil, crea identidad nacionalista, puede despertar luchas de poder con reglas políticamente correctas, como diría Polansky: 'Luna de miel, luna de hiel'".

Y añade que también despierta los mismos circuitos cerebrales de tener un buen amante, con "la pasión, el deseo, la euforia, el sentimiento de enamoramiento...". Por eso, si Messi se va, explica la psicóloga, puedes sentir como si se fuera esta "luna de miel", como si te deja el amante, triste, en luto, y con el añadido de que te deja por "otro", el París Saint-Germaine, un equipo que ahora será suyo. "Deja de ser 'nuestro' Messi para ser 'su' Messi, y eso hace que los que se sentían parte de esta luna de miel, ahora estén derrotados, abandonados, sientan lógicamente un estado de duelo, de muerte de su amante y de no pertenencia".

Leo Messi 30 Foto PSG

Messi con su nueva camiseta en el campo del París Saint-Germaine / Foto: PSG

Que Messi se haya marchado del Barça ha paralizado a toda una afición y a toda una sociedad en masa que se ha volcado en compartir recuerdos, imágenes, textos y despedidas del crack barcelonés. Algunos lo verán como un simple cambio de trabajo, como un cambio de equipo, pero para otros, sin embargo, el sentimiento va más allá: "Messi no solo cambia de trabajo, sino que nos deja. Sería como decir: 'Mi pareja sigue la carrera de parejas'. ¡Nooo! No queremos que nuestra pareja siga amando, queremos que nos siga amando a nosotros". Messi nos deja y nos deja huérfanos de la pasión que se sentía a través de tener el mejor jugador del mundo para nosotros, relata la experta en psicología.

¿Tenemos pánico a lo que vendrá? ¿A la incertidumbre después del adiós de Messi al Barça?

Totalmente, responde Sánchez. "¿Te has sentido alguna vez realmente enamorado de alguien y la persona te ha dejado? En este momento sentimos que nunca más volveremos a enamorarnos igual, que nadie será igual, es el miedo a no volver a sentir la pasión que sentías con y a través de Messi, y vendrá otro, quizás mejor, pero el cerebro siente que es ÉL, por eso siente temor a no volver a sentirse igual". Por otra parte, apunta la experta, encontramos la parte más pragmática: ¿si Messi es el mejor jugador del mundo, quién superará a un dios como él?

Antes de acabar la entrevista con Mayte, comentamos un mensaje que recibí de un amigo el día que se anunció que Messi se marcharía del Barça: "No es broma si te digo que hoy estoy en el top 5 de los peores días de mi vida". "Tu amigo lo sentía realmente. El fútbol aumenta la dopamina en cada victoria, la llamada hormona del amor, y todos la necesitamos aumentar, algunos por la vía amorosa, otros por la sexual, o también por la vía del fútbol". Los aficionados, continúa la psicóloga, son más felices con las victorias, pero la durabilidad de esta pasión es menor que la sensación de tristeza después de una derrota. Imaginémonos, pues, si no solo se pierde un partido, sino que se pierde al mejor jugador... Una situación que, a muchos, les está afectando mucho más de lo que se habrían llegado a imaginar.

Messi Camp Nou EuropaPress

La cara de Messi ya no luce en el Camp Nou / Foto: Europa Press

"Durísimo", "Horror", "El día más triste"... Las reacciones por parte de periodistas, conocidos o anónimos por las redes han sido infinitas. Todas ellas, mostrando la tristeza que Messi les está haciendo vivir, a lo que la psicóloga se pregunta: "¿Por qué necesitamos el fútbol para sentirlo? ¿Qué tipo de vacío existencial siente el ser humano actual, que tiene que sentir eso a través de un deporte o de un dios llamado Messi?".

Aunque emocionalmente es un golpe duro para todos, pensemos en él. No olvidemos que Messi se va triste, pero al mismo tiempo contento de encarar esta nueva etapa en el PSG, en uno de los mejores clubs del mundo donde se le abren las puertas a ganar muchos más títulos en comparación con la trayectoria que le habría esperado en el Barça.

¿Cómo superar la pérdida de Messi en el Barça?

"A todos los que están en luto, no les diría que no sientan este dolor, igual que no les diría que no se apasionen por un partido". Sánchez dice que los animaría a que se sigan sintiendo vivos, a que dejen las corazas artificiales que les alejan de su esencia, a que se animen a ser niños y a jugar. "A jugar a fútbol, con el sexo, con la vida, los animaría a que sientan su identidad a través del contacto, de la piel, de sudar, y no solo de ver el sudor de un jugador en el campo desde las gradas, sino que bajen y que se guíen por su GPS emocional hacia los millares de lugares que nos hacen sentir de nuevo vivos".

Y una cita antes de terminar: "El fútbol es la cosa más importante entre las cosas menos importantes", dijo el argentino de Rosario Jorge Valdano.