Cada día que pasa, Marcus Rashford refuerza la sensación de que su fichaje definitivo por el FC Barcelona debe convertirse en una prioridad. El delantero inglés, cedido por el Manchester United, está atravesando un gran momento de forma y se ha consolidado como uno de los jugadores más desequilibrantes en el esquema de Hansi Flick. Su impacto es inmediato: encara, desborda y aporta la chispa ofensiva que tanto necesita el equipo azulgrana.
El detalle que más llama la atención es su cláusula de compra de apenas 30 millones de euros. En un mercado cada vez más inflado, donde futbolistas de nivel similar superan con facilidad los 70 u 80 millones, la operación se presenta como una auténtica ganga. En el vestuario, en el cuerpo técnico e incluso en la directiva son conscientes de que, si mantiene este nivel, Laporta estará casi obligado a ejecutar la opción de compra.
Un extremo puro que encaja en el Barça
Rashford ha demostrado que su mejor versión aparece partiendo desde la banda izquierda. Con espacio por delante y libertad para encarar, el inglés marca diferencias. Su potencia, velocidad y capacidad para definir lo convierten en un perfil difícil de encontrar en el mercado actual. En el Barça, además, se ha integrado a la perfección en los automatismos de Flick, ofreciendo siempre soluciones tanto en transiciones rápidas como en ataques posicionales.
El técnico alemán está encantado con su actitud. Más allá de los goles y asistencias, valora su capacidad de sacrificio y su predisposición para adaptarse a diferentes esquemas. Con Lamine Yamal por la derecha y Ferran Torres alternando entre la punta y la banda, Rashford completa un tridente que genera ilusión en la afición culé.
Un mensaje claro para Laporta
Cada partido es, en realidad, un mensaje directo de Rashford a Laporta: por 30 millones no hay una opción mejor. Con solo 27 años, se encuentra en la plenitud de su carrera y ofrece garantías tanto para el presente como para el futuro. En un contexto en el que el Barça debe controlar cada euro que gasta, asegurar un fichaje de este nivel por un precio tan reducido parece una oportunidad que no se puede dejar escapar.
En las redes sociales, cada actuación del inglés despierta comentarios que van en la misma línea: "hay que ficharlo ya". La grada también lo ha adoptado con rapidez, consciente de que un extremo con su capacidad de desequilibrio es clave para devolver al Barça a la élite europea.
Laporta y la directiva deberán mover ficha en los próximos meses. Si Rashford mantiene el nivel actual, no habrá dudas: el Barça deberá hacer efectiva la cláusula de compra. Porque jugadores así no se encuentran todos los días y porque, sin él, el equipo perdería a una de sus armas más peligrosas.