Marc Márquez es el claro beneficiado por la crisis que vive Francesco Bagnaia. Porque esto le ha servido para demostrar que la moto ya no es tan superior a las demás como en el pasado, y que si ha logrado ganar el campeonato de MotoGP con esta ventaja, es gracias a su talento. Y se ha convertido en la salvación del Ducati Lenovo Team, y en especial, de Gigi Dall’Igna. Porque sin él, se hubieran quedado sin conquistar el trofeo de nuevo.
La prioridad del equipo oficial era volver a salir campeón, después de que el año anterior Jorge Martín diera la sorpresa, y lograra conquistar el trofeo pese a estar en un equipo satélite, el Prima Pramac Racing. Y lo han logrado gracias al ‘93’, quien tuvo una adaptación inmediata a la Demosedici GP 25, firmando auténticas exhibiciones, como demuestra el increíble número de victorias que consiguió, tanto en las carreras dominicales, como en especial, en la Tissot Sprint, donde ha sido el gran dominador.
Esto le permitió asegurarse matemáticamente el título cuando todavía quedaban varios Grandes Premios por celebrarse, aunque, desgraciadamente, sufrió una lesión en el GP de Indonesia que todavía le mantiene de baja. No reaparecerá en todo lo que queda de 2025, y la prioridad es que se recupere de la mejor forma posible, para evitar posibles recaídas. Y en la marca de Borgo Panigale han aprovechado este periodo para iniciar las conversaciones, y conseguir que firme un nuevo contrato.
Márquez todavía está vinculado a Ducati hasta finales de 2026, es decir, que tiene otro año más de contrato. Después, será libre, y no han tardado en aparecer las especulaciones que le colocan de nuevo en el HRC Honda Factory Team, donde podrían ofrecerle un salario astronómico, incluso superior al que tenía antes de irse. Aparte, por fin ven la luz al final del túnel, y parece que vuelven a ser competitivos, como demuestran las actuaciones que han completado Joan Mir y Luca Marini recientemente.
Pero en Bolonia quieren impedir sea como sea que Marc les abandone, y la intención es cerrar la ampliación de su compromiso por la vía rápida. Porque es la cara más reconocible de la compañía, y desde su fichaje, su repercusión mediática en todo el planeta se ha multiplicado.
Márquez aprovecha para pedir una gran mejora salarial
Marc sabe que en Ducati le necesitan, sobre todo viendo el discreto rendimiento de Bagnaia, y ha aprovechado su situación actual, y el interés de otras fábricas, para pedir una importante mejora salarial.
Así que espera que le aumenten la ficha que percibe actualmente, que es de 12 millones de euros anuales. Por lo tanto, es muy probable que se convierta en el mejor pagado de MotoGP, ya que ahora mismo está empatado con Fabio Quartararo.