El Real Madrid cumple con las quinielas y supera a la Real Sociedad al rentabilizar las escasas ocasiones (3-0). En un partido extraño por la relación del equipo con la afición, los goles de Mateo Kovacic, Cristiano Ronaldo y Álvaro Morata ponen la Liga de cara para los blancos.

Liga después de Copa

El Madrid volvía al Santiago Bernabéu después de la derrota en la Copa del Rey. Los ánimos del público, a pesar de los traspiés del Barça y la Sevilla, enrarecidos y alejados de ayudar al equipo para dar otro paso hacia la Liga. Los despropósitos de Danilo y Karim Benzema en Vigo les han valido una sonora pitada en la presentación del equipo.

La Real Sociedad también venía de caer en la Copa pero ofreciendo una imagen muy distinta. La puesta en escena alegre, descarada y atractiva de los guipuzcoanos contra el Barça se ha repetido en la capital. Y la primera ocasión del partido ha sido un claro ejemplo. El joven Mikel Oyarzábal le ha ganado el duelo por la banda a Sergio Ramos pero su pase hacia atrás no ha encontrado rematador. La Real avisaba con la pelota. Y el Madrid aceptaba el planteamiento.

El Bernabéu tiene memoria

Los de Zidane se encontraban cómodos cediendo la iniciativa y saliendo al contragolpe. Casemiro era incapaz de dirigir los ataques y tanto Toni Kroos como Mateo Kovacic se diluían persiguiendo sombras. El partido entraba en una dinámica muy peligrosa por los blancos donde era muy fácil hacerse daño. La relación con la afición se tensaba con el paso de los minutos y el punto álgido se ha vivido con Cristiano Ronaldo.

Después de dos pérdidas del portugués, al Bernabéu se le ha acabado la paciencia y ha empezado a silbar. Ronaldo ha contestado al rechazo del público con algún gesto de desaprobación y un fantástico pase de gol. Su asistencia la ha aprovechado Kovacic para hacer el 1-0 cuando peor lo pasaba el Madrid. El gol, sin embargo, no ha servido para cambiarle la cara a un equipo que parecía acusar los últimos malos resultados.

La segunda parte ha empezado de la misma manera que la primera. La ventaja era crédito insuficiente para un equipo que temblaba en cada ataque de la Real Sociedad. Un equipo que jugaba por inercia. Un equipo que era incapaz de no sufrir defendiendo. Un equipo que ha sentenciado al partido corriendo a los espacios. Otro error de los guipuzcoanos ha catapultado a Cristiano para que hiciera, al contragolpe y después de picar la pelota por encima de Rulli, el 2-0.

Mucho premio, poco juego

El resultado era injusto con la propuesta de la Real. Los de Eusebio Sacristán han quedado aturdidos con el gol de Ronaldo, acusando el desgaste físico del partido en el Camp Nou. El Madrid se ha dedicado a hacer correr el tiempo y guardar el resultado. Zidane ha dado minutos a Álvaro Morata e Isco Alarcón. La expulsión de Íñigo Martínez ha acabado de enterrar las pocas esperanzas de rebelión.

La Real Sociedad se ha protegido a través de la posesión, tirando la toalla y aceptando la derrota. Una derrota que ha crecido, como no, al contragolpe. En los instantes finales, un centro de Lucas Vázquez ha acabado en la cabeza de Morata para marcar su décimo gol de la temporada. La victoria del Madrid tapará otro partido gris, de pocos detalles positivos, a excepción de los tres puntos.

Los goles

1-0 Mateo Kovacic 37'

 

2-0 Cristiano Ronaldo 50'

 

3-0 Álvaro Morata 82'