Obligados para unos y nada está hecho para los otros. Luis Enrique ha hablado con mucha precaución en la previa del partido contra el Atlético de Madrid de Copa del Rey donde ha podido diferenciar dos claros conceptos. El Barça tiene el resultado a favor, pero igual que "la eliminatoria está bien enfocada", todo puede cambiar.
El entrenador azulgrana también le da una importancia máxima a una cuarta final de Copa consecutiva para el club y que sería su tercera particular. El rival mañana saldrá a por todas y no está nada hecho todavía.
El Atlético de Madrid puede sorprender
El Atlético de Madrid está obligado a marcar dos goles como mínimo para cambiar la eliminatoria. Tanto los azulgranas como los colchoneros son conscientes de que todo está por decir y que 90 minutos de Copa pueden tener muchos cambios. Luis Enrique espera que sea "un día especial para todos", pero el principal objetivo será pararlos.
"Este partido presenta aspectos determinantes. Mañana puede ser que por el resultado y las circunstancias hagan ver a un Atlético de Madrid diferente", ha asegurado el técnico asturiano. A diferencia del que ha ido diciendo las últimas ruedas de prensa que conocen a todos los rivales y que es muy complicada la sorpresa en el fútbol de este nivel, contra los colchoneros, el resultado y para Simeone, la sorpresa entra dentro de los planes.
"Normalmente hemos visto al Atlético en el Camp Nou más cerca de su área, pero quizás los vemos arriesgando más y presionando más arriba". Ahora sí que hay más posibilidades y los vídeos de partidos anteriores pueden cambiar radicalmente del estilo que se pueda ver en esta vuelta de semifinales de Copa.
Alerta en las tarjetas
El Barça llega al partido con casi todos los efectivos, pero con una cierta desazón respecto de las tarjetas amarillas. Messi, Umtiti y Jordi Alba están avisados de sanción si reciben una nueva tarjeta y se perderían una supuesta final. Luis Enrique, consciente de la situación, ha querido quitarle hierro: "Afortunadamente son expertos en partidos de nivel y no condiciona para nada a los jugadores".
El gran rendimiento de los últimos partidos del teórico fondo de armario ha puesto al Barça un peldaño por encima. A la baja de Neymar por acumulación de tarjetas y de Rafinha por lesión, las buenas noticias llegan al vestuario con las altas que se harán oficiales mañana de Iniesta y Busquets. A la recuperación de los dos puntales en medio del campo también se añade Piqué, plenamente recuperado de las molestias.
La duda en el extremo de Neymar
La baja obligada por sanción de Neymar, se le incorpora la gran duda a Luis Enrique en el extremo. "Tengo menos opciones que en el pivote, pero Denis, Arda o Rafinha son opciones", ha asegurado Luis Enrique aunque el brasileño no llegaría a tiempo.
Arda Turan parece que será el encargado de llevar el ataque por la banda izquierda y también para volver a jugar contra su exequipo. "El objetivo principal será pararlos y llegar a la final", la consigna que también será exigida al turco.
Un torneo muy atractivo para el Barça pero que todavía no está decidido. Luis Enrique ha querido ser cauto y ha hablado en nombre de sus jugadores: "No tengo ningún jugador de la plantilla que piense que todo ya está hecho. Sería ridículo pensar que será plácido y fácil".