Luis Díaz no se rinde. El extremo colombiano del Liverpool sigue teniendo como prioridad vestir la camiseta del FC Barcelona esta próxima temporada y, según fuentes cercanas al jugador, esta semana dará un paso decisivo para intentar desbloquear su fichaje por el conjunto azulgrana. El atacante quiere reunirse con el club inglés en los próximos días para pedirles que flexibilicen su postura y acepten entablar conversaciones con el Barça.
Actualmente, el Liverpool mantiene una postura firme: no dejarán salir a Luis Díaz por menos de 80 millones de euros, una cifra que está fuera del alcance del Barça en su situación económica actual. Sin embargo, el jugador considera que su voluntad puede jugar un papel clave para que se rebaje el precio del traspaso. Luis está dispuesto incluso a presionar internamente con el objetivo de que la operación se cierre por una cantidad cercana a los 60 millones, una cifra que el club catalán considera mucho más asumible.
Deco sigue atento
Desde el Barça, Deco y la dirección deportiva siguen con atención cada movimiento. El interés por Luis Díaz es real y viene de lejos, y en los despachos azulgranas creen que sería el perfil ideal para reforzar el ataque por la banda izquierda, con desequilibrio, velocidad y gol. Sin embargo, en el club son conscientes de que, si el Liverpool no baja significativamente sus pretensiones, será muy difícil competir con otros grandes clubes europeos que también están al acecho.
No obstante, el Barça cuenta con un aliado clave: la voluntad del futbolista. Luis Díaz ha priorizado la opción de jugar en el Camp Nou incluso por encima de otras propuestas deportivas más solventes a nivel económico. Aunque el Bayern de Múnich también está muy interesado en ficharlo —y tiene más recursos para hacerlo—, el colombiano ha decidido esperar al Barça antes de tomar una decisión definitiva sobre su futuro.
Semana clave
Los próximos días serán clave para ver si esta presión por parte de Luis Díaz surte efecto. Si el Liverpool accede a negociar por una cantidad inferior a los 80 millones, el Barça activará las gestiones formales y podría intentar incluir fórmulas como un pago aplazado o variables por objetivos, con tal de cuadrar las cifras dentro de los márgenes que impone el fair play financiero.
Mientras tanto, el colombiano mantiene su forma física al máximo y ya ha comunicado a su entorno más cercano que, si depende de él, hará todo lo posible para que el Camp Nou sea su próxima casa. En un verano cargado de incertidumbres y negociaciones, Luis Díaz está dispuesto a hacer su parte para cumplir su sueño culé.