Los primeros días de Robert Lewandowski en el Barça están siendo muy positivos. La ilusión de la afición es enorme, y el proyecto de Xavi Hernández es muy convincente. El polaco está muy feliz por haber abandonado la Bundesliga, y probarse en La Liga Santander, una de las más exigentes del planeta. Además, en el vestuario le han recibido muy bien, y están haciendo todo lo posible para que su adaptación y su aclimatación sea rápida y sencilla.

En cambio, hay algunos jugadores que no ven con tan buenos ojos la incorporación del ex del Borussia Dortmund, del Lech Poznan y del Bayern de Múnich. Por ejemplo, Frenkie de Jong, a quien le están exigiendo que se marche, o en caso de quedarse, que se rebaje el sueldo. Pero el holandés no tiene pensado solidarizarse, y acusa a Joan Laporta de precipitarse realizando tantas contrataciones galácticas, cuando el presupuesto no lo permite.

Sin embargo, el gran enemigo del delantero de 33 años es otro. Nos referimos a Memphis Depay, con el cual prácticamente no ha tenido contacto ni ha hablado durante sus primeros días. Obviamente, sabe que tendrá imposible jugar después de que hayan incorporado al ganador de los dos últimos ‘The Best’. Pero lo que más le ha molestado es el hecho de que le estén presionando para que deje libre el dorsal número ‘9’.

En el Camp Nou quieren que pase a ser propiedad de Lewandowski, pues de este modo venderían una gran cantidad de camisetas. Actualmente, todavía no han podido vender demasiadas, debido a que no le han asignado ningún dorsal, y por el momento ha utilizado el ‘12’ de Martin Braithwaite. Robert también quiere seguir luciendo ese número, para proteger su marca y su empresa, que se llama ‘RL9’. En caso de no lucir ese dorsal, el nombre no tendría demasiado sentido.

Memphis Depay Barça / Foto: EFE
Memphis Depay/ Foto: EFE

Pero eso no es lo que más ha molestado a Memphis, que también está realmente descontento después de enterarse de otra cosa, que no le ha hecho ni pizca de gracia.

Lewandowski quiere quedarse la casa de Depay

Lo que más ha disgustado a Depay es enterarse, a través de la prensa, que Lewandowski quiere quedarse con la casa en la que actualmente vive. Cree que es la manera que tiene el Barça de intentar forzar su venta, aunque él ya ha dejado claro que no quiere irse.

Por muchas ofertas que pueda tener y recibir en las próximas semanas, Memphis, igual que de Jong, no ha pensado en un cambio de aires, y quiere respetar el documento de trabajo que tiene firmado.

Y no caduca hasta 2023.