LeBron James y Kobe Bryant, dos de las grandes estrellas del siglo, tenían una relación de rivalidad y de admiración. James, todavía en activo y jugando en los Lakers, superó la marca de puntos de Bryant como tercer máximo anotador de todos los tiempos de la NBA.

Y tras la felicitación de Kobe a LeBron por superar sus 33.643 puntos, ocurrió la tragedia.

Bryant se accidentó con su helicóptero y nos dejó antes de tiempo, cuando nadie lo esperaba. Y LeBron lloró desconsoladamente al enterarse de su muerte.

Un recuerdo imborrable y que tanto LeBron James como todos los seguidores de la NBA siempre recordarán.