El FC Barcelona afronta uno de los partidos más importantes de la temporada, el duelo de Champions League contra el PSG, y lo hará con un ataque que ilusiona tanto al cuerpo técnico como al vestuario. Hansi Flick tiene clara su apuesta ofensiva: Lamine Yamal, Marcus Rashford y Ferran Torres formarán el tridente titular en Montjuic. Una combinación que mezcla juventud, velocidad, hambre y, sobre todo, confianza mutua.
Ferran, la pieza que encaja
Si algo ha demostrado Ferran en este arranque de temporada es que está preparado para ser el ‘9’ de este Barça. El valenciano atraviesa el mejor momento desde que llegó al club, con goles, movilidad constante y una presión incansable que ayuda al equipo a recuperar balones en zonas peligrosas.
Tanto Lamine Yamal como Rashford han dejado claro en el vestuario que Ferran es el delantero ideal para ellos. Su capacidad de asociarse, de fijar centrales y de abrir espacios resulta clave para que los extremos puedan explotar sus virtudes. La presión alta y su dinamismo hacen que el ataque culé sea mucho más difícil de controlar para las defensas rivales.
Lamine llega con chispa
Tras superar su lesión, Lamine está de vuelta y con las ganas de siempre. El joven de 18 años no solo quiere jugar, sino ser decisivo en un escenario de máxima exigencia. Ante la Real Sociedad ya dejó una asistencia brillante apenas un minuto después de entrar al campo, una muestra de que su calidad y desequilibrio siguen intactos.
El canterano sabe que contar con Ferran Torres como referencia en el área le permite recibir el balón con más libertad, ya que los centrales estarán más pendientes del ‘9’. Eso le abre espacios para encarar y generar ocasiones, justo lo que más disfruta.
Rashford, listo para asumir galones
El inglés, cedido por el Manchester United, también llega en un gran momento. Su velocidad y potencia por la banda izquierda pueden ser un auténtico dolor de cabeza para la defensa del PSG. Rashford ha entendido que Ferran facilita su juego: al arrastrar defensores, le permite recibir en ventaja y encarar con más espacio.
Además, el inglés quiere reivindicarse en Europa, y este partido es una oportunidad perfecta para demostrar que puede ser decisivo en las grandes noches y convencer al Barça de quedarse con él en propiedad.
El tridente que ilusiona
Con Lamine por derecha, Rashford por izquierda y Ferran en punta, Flick tiene un ataque fresco, vertical y dinámico. No hay lugar para la pausa ni para la previsibilidad. Los tres jugadores se entienden bien, se complementan y comparten la misma ambición: ser protagonistas de una noche mágica en Montjuic.
El tridente está servido y tanto Flick como el vestuario creen que puede ser la clave para superar al PSG y dar un golpe sobre la mesa en la Champions.