En el vestuario del FC Barcelona, Lamine Yamal ha encontrado no solo compañeros, sino verdaderos amigos. Uno de ellos es Héctor Fort, lateral derecho formado en La Masia con quien mantiene una excelente relación dentro y fuera del campo. Ambos compartieron vestuario la pasada temporada y han coincidido en diferentes categorías inferiores, forjando una amistad que va más allá del césped.
Héctor Fort, con pie y medio fuera
Sin embargo, Lamine es consciente de que el futuro de Héctor Fort en el Barça está en el aire. A pesar de su talento y proyección, el joven lateral tiene muy complicado ganarse un sitio en la plantilla del primer equipo esta temporada. Hansi Flick, desde su llegada al banquillo culé, ha dejado claro que su prioridad para el lateral derecho es Jules Koundé, quien terminó la temporada pasada a un nivel altísimo. Además, el técnico alemán también cuenta con Eric Garcia como opción para ese carril, a pesar de que su posición natural es la de central.

La competencia en defensa y las necesidades del club hacen que una salida en forma de cesión o incluso de traspaso con opción de recompra sea la vía más probable para Héctor Fort. Flick prefiere una plantilla corta pero polivalente, y en ese contexto, el joven defensa podría quedarse sin minutos suficientes para seguir creciendo.
Lamine Yamal, que no ha escondido su admiración y cariño por Fort, quiere que siga en el club y le ha hecho saber que confía en que todavía puede tener un papel importante. Sin embargo, también es consciente de la realidad deportiva y económica del Barça. Según fuentes cercanas al entorno del jugador, el propio Fort ve con buenos ojos una cesión a un equipo que le garantice protagonismo y minutos, siempre con la intención de regresar al Camp Nou más preparado.
El Barça aún no ha tomado una decisión definitiva, pero Deco ya ha recibido propuestas por Héctor Fort de varios clubes españoles. El jugador tiene buen cartel en LaLiga y no faltan interesados en acogerle durante una temporada.

Mientras tanto, Lamine Yamal seguirá compartiendo entrenamientos con su amigo mientras pueda. Ambos saben que el fútbol es cambiante, pero también que las amistades forjadas en La Masia perduran más allá de los equipos. Si Fort acaba saliendo, lo hará con el apoyo total de Lamine y con la puerta del Barça entreabierta para volver más fuerte.