Johan Cruyff dejó una cena para el recuerdo al lado de Jorge Valdano. En el documental emitido por TV3 y producido por Mediapro Gràcies, Johan, el mítico holandés comparte una charla cargada de anécdotas y fútbol.
Salid y disfrutad
Una de las frases más famosas de Cruyff, es con la que se despidió de los futbolistas en el vestuario antes de ganar la primera Liga de Campeones del club en Wembley contra la Sampdoria (1992). "Salid y disfrutad" ya forma parte de la historia del Barça y del fútbol. "Si vas al 100% y haces lo que puedes, no se puede pedir más. Quizás jugarás una vez en la vida una final de la Champions. Si no disfrutas, estás loco perdido", señaló un Cruyff que consiguió cambiar la mentalidad perdedora del club.
Ideas revolucionarías
La capacidad para reinventar un deporte que parecía inmóvil es uno de los grandes legados de Johan Cruyff. Su cabeza iba siempre por delante del rival. Como muestra, dos anécdotas. La primera, sobre un delantero del Atlético de Madrid. "Me dijeron que el delantero del Atlético –Manolo– tenía un desmarque fantástico. Entonces decidí que no le marcaríamos y, desde entonces, no nos marcó ningún gol más. Convertir la dificultad en ventaja es lo que busqué siempre, como jugador y entrenador", explica Cruyff.
La segunda es su famoso penalti indirecto con Jesper Olsen en un partido entre el Ajax y el Helmond Sport: "Cuando tiré el penalti a medias con Olsen, el árbitro me vino a preguntar si era válido. Estas son las cosas bonitas que se viven dentro del campo. Lo habíamos entrenado en broma. Ya sabes, el día que pasa y no has reído, es un día perdido. No reír haciendo deporte es horroroso".
La filosofía Barça
El holandés fue el encargado de sembrar la primera semilla de un estilo que ha llevado al Barça a ganar y enamorar al mundo del fútbol: "Entre 1998 y 2002 se perdió el toque de pelota y el control del partido. Por suerte, había jugadores de mucha calidad. Después vino Guardiola y subió al primer equipo a Busquets y al canario –Pedro–. A estos no les conocía ni su madre pero allí están y llevan muchos años".
Podía parecer que el juego por el que apostaba Cruyff era más estético que efectivo pero el técnico tenía una idea muy clara sobre que se tenía que hacer delante de la portería rival: "Recuerdo cuando era entrenador del Ajax y tenía unos juveniles buenísimos. Lo hacían todo bien pero en la línea de gol la picaban y se marchaba fuera. Estos, a correr, a hacer líneas y no jugaban el día siguiente. El gol se tiene que marcar siempre. Es lo más difícil del fútbol".
El cuidado del vestuario
Si hay una cosa sagrada en el mundo del fútbol es el vestuario. Entre las cuatro paredes de la Ciudad Deportiva o el Camp Nou está donde gestiona gran parte del éxito o el fracaso del Barça: "Si eres Puyol o Xavi y lo has ganado todo, y viene un chico de 21 años y cobra el doble que tú, ¿como te quedas?. Este es el problema, que manda gente que no sabe equilibrar una plantilla. Estos son los detalles que generan los mayores problemas. No puede ser que echen al masajista de confianza de Xavi, Iniesta y Messi. Lo pueden echar ellos, no la junta. No hay un detalle que no conozca el vestuario".
Una de las grandes estrellas del actual vestuario blaugrana es Leo Messi. Cruyff conoció al crack argentino cuando este sólo tenía 15 años y ya destacaba jugando en La Masia. "Tenía contacto con Rijkaard y me habló de un chico que jugaba bien, chiquitín, pero que utilizaba muy bien el cuerpo. Cuando el pequeño utiliza bien el cuerpo, el grande no lo puede defender. Aparte de su calidad futbolística, Messi sabe utilizar el cuerpo. No se podía saber que iba a marcar una época. Que tenía una calidad enorme, sí", señaló el genio holandés.