Una de las grandes prioridades que el Barça se ha marcado en el mercado estival es conseguir la incorporación de Bernardo Silva. Después de fracasar en sus intentos de sacarlo del Manchester City hace unos meses, Joan Laporta y Mateu Alemany prometieron volver a probar suerte en 2023. Y eso es lo que harán, aprovechando que el acuerdo con el jugador y con su representante, el controvertido y mediático Jorge Mendes, está cerrado desde hace tiempo.

Los contactos han seguido existiendo, y hasta el momento, el internacional portugués no ha cambiado de opinión. Sigue considerando que su etapa en la Premier League ha finalizado, y está convencido de que a estas alturas de su carrera, quiere y necesita un nuevo desafío. Y la oportunidad de aterrizar en La Liga Santander le agrada y le seduce mucho, así que está dispuesto a hacer lo que sea necesario para acabar poniéndose a las órdenes de Xavi Hernández.

En el Camp Nou le prometen un proyecto muy ambicioso, y sería una pieza indispensable en los esquemas. Aunque primero tendrán que convencer a Pep Guardiola para que permita la venta de una de sus grandes estrellas, ya que siempre ha hablado maravillas del ex del AS Mónaco y del Benfica. No se conformará con poco dinero, y como mínimo reclamará unos 80 millones de euros, una cantidad muy a tener en cuenta.

Por suerte, en el Barça tienen una alternativa para poder ahorrarse esa inversión, y consiste en incluir a un titular en la operación, como moneda de cambio. El elegido para ello es un Frenkie de Jong que ya estuvo muy cerca de marcharse al Manchester United, una opción que el ‘21’ vetó, pues no le seducía demasiado la idea de irse a Old Trafford. En cambio, sí que le convence mucho más unirse a un conjunto como los ‘citizens’, donde optaría a ganar todos los títulos.

Y en el Etihad Stadium parecen estar bastante dispuestos a aceptar este trueque, y dejar salir a Bernardo a cambio del holandés, que es unos años más joven, en contrato, tres, sin dinero de por medio.

Un movimiento con mucha polémica

El Barça podría cerrar este intercambio para contentar a Xavi, aunque sería bastante polémico. Porque la afición considera que De Jong debe de ser una pieza indispensable, y que merece seguir en el equipo, sobre todo viendo su rendimiento reciente, siendo uno de los pocos futbolistas que ha estado a la altura de las exigencias.

Además, no creen que Silva sea necesario, y hay que valorar el hecho de que cuando aterrice estará cerca de cumplir los 30 años.