El FC Barcelona tiene clara su hoja de ruta en el mercado de fichajes, y en ella hay una prioridad innegociable: reforzar la banda izquierda del ataque para encontrar el complemento ideal de Lamine Yamal. Sin embargo, tanto Joan Laporta como Deco han decidido abordar esta operación con paciencia. No hay urgencia inmediata, y si el fichaje se alarga hasta las últimas semanas de agosto, no será motivo de preocupación.
El objetivo es claro: fichar un extremo de primer nivel, pero sin precipitarse ni entrar en subastas que disparen el coste de la operación. En los despachos del club son conscientes de que el mercado cambia radicalmente en las últimas semanas, cuando muchos equipos rebajan sus exigencias económicas ante la presión del cierre de la ventana de fichajes. Por eso, desde el área deportiva ya se ha trasladado la idea de que esperar puede jugar a favor del Barça.
Luis Díaz, Leao y Rashford, en el radar
Los nombres que más seducen al cuerpo técnico y a la dirección deportiva están bien definidos. Luis Díaz es una de las opciones más atractivas, aunque su situación sigue marcada por la incertidumbre. El colombiano ha lanzado un ultimátum al Liverpool para que le mejoren el contrato o le dejen salir, y aunque su deseo sería vestir de azulgrana, su precio es elevado, con una tasación que supera los 80 millones de euros.
En paralelo, Rafael Leao también gusta mucho. El Milan estaría dispuesto a negociar su salida por una cifra cercana a los 60 millones, algo que Laporta ve más factible que el caso del colombiano. Por su parte, Marcus Rashford sigue en el radar, pero no termina de convencer del todo a Hansi Flick, que lo considera un jugador irregular.
Pese a ello, los tres continúan encima de la mesa y están siendo monitorizados en función de cómo evolucione el mercado, tanto en salidas como en oportunidades que puedan surgir a última hora.
Calma y estrategia
El Barça sabe que para poder fichar, también necesitará liberar masa salarial y cerrar alguna venta importante. Mientras esto no ocurra, no forzarán ninguna operación, y tampoco se lanzarán a por un perfil que no encaje 100% en la idea de Flick.
El mensaje es claro: la prioridad está definida, pero el tiempo juega a favor del club. Laporta y Deco prefieren esperar a moverse con firmeza cuando las condiciones sean más ventajosas, aunque eso implique cerrar el fichaje en los últimos días del mercado.
Con Lamine Yamal como figura indiscutible en la banda derecha, el Barça quiere un socio de nivel para la otra banda, pero no a cualquier precio ni a cualquier ritmo. La calma será la mejor aliada.