Intercambio de reproches entre Josep Maria Bartomeu, presidente del Barça, y Pep Guardiola, técnico del Manchester City. Este martes, y en plena crisis por la gestión digital del club blaugrana, Bartomeu decidió enviar una bofetada al City en relación a la sanción de 2 años que la UEFA ha interpuesto a la entidad inglesa por incumplir el fair play financiero.

Las palabras de Bartomeu fueron un dardo envenenado: "Nosotros agradecemos a la UEFA que en estos últimos años haya estado tan segura de hacer el seguimiento de fair play financiero. En el Barça lo hemos ido siguiendo y tenemos regularmente investigaciones o hacemos reuniones con la UEFA para explicar cómo lo estamos haciendo. Desde aquí queremos dar nuestro apoyo a la UEFA por todo lo bueno que hace por el fútbol", decía.

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Pep Guardiola, sin embargo, no ha tardado en responder. Este miércoles el técnico catalán defendió su club de las acusaciones culés. "Si el Barça está contento porque estamos suspendidos, le diría al presidente (Bartomeu), que apelaremos, creemos que tenemos razón. Mi consejo al Barça es que no hable tan alto, porque a veces todos estamos involucrados en estas situaciones". Más claro, imposible.

La enemistad entre la directiva heredera de Sandro Rosell y Pep Guardiola es pública y notoria. Hay que recordar, además, que el escándalo de I3 Ventures también ha salpicado al entrenador del City, a quien se atacó a través de publicaciones de perfiles falsos en la red.