La investigación de la trama Oikos sigue avanzando y las noticias, de momento, todavía no dan más esperanzas al Girona. El club catalán está esperando que la justicia actúe rápido y decida si se sanciona a los futbolistas implicados en los partidos amañados y si el Valladolid, uno de los clubs involucrados, acaba teniendo una penalización o no que permita a los catalanes mantenerse en Primera División.
El Girona quiso personarse en la causa que instruye el Juzgado número 5 de Huesca y solicitó la apertura de un expediente al Valladolid. El club catalán reclamaba una Liga de 21 equipos esperando que se resolviera el caso y así poder seguir siendo equipo de la máxima competición española. Pero a pesar de las intenciones del Girona, según ha adelantado el diario Marca, el juez Ángel de Pedro asegura que "el Girona Fútbol Club, no tiene la cualidad de ofendido por el delito, al no ser titular del bien jurídico protegido, que es colectivo, la protección de la pureza de la competición deportiva cuando están en juego intereses económicos".
Así pues, el Girona no se puede involucrar en el caso porque a pesar de ser un afectado de segundo grado, no es uno de los implicados directos en la trama Oikos. A quien si admite el juez es la acusación particular presentada por el Valladolid, que es el club "perjudicado" en el caso.
EFE
¿Por qué el Girona se persona como parte perjudicada?
Hay que aclarar que el Girona no se presenta como parte perjudicada por los hechos que sucedieron en la última jornada de Liga entre el Valladolid y el Valencia (0-2), en el partido que fue amañado por los cabecillas de la trama Oikos. Este hecho, en cualquier caso, sólo abrió la caja de los truenos.
El Girona llegaba a la última jornada de Liga con una opción remota de salvarse. Tenía que golear al Alavés en Mendizorroza y que el Rayo hiciera lo mismo en el estadio del Celta de Vigo, hecho que finalmente no sucedió. Lo qué pasara en Valladolid, pues, le era indiferente, y es que el conjunto castellano ya estaba salvado gracias a los 4 puntos de ventaja que tenía sobre el Girona, el primer equipo que marcaba la zona de descenso.
¿Por qué se queja, pues, el Girona? El club de Montilivi considera que el Valladolid ha adulterado la competición dejándose perder y, por lo tanto, estima que tiene que ser sancionado. La sanción establecida en el reglamento de la RFEF en casos como estos –y siempre que se demuestre que el Valladolid como entidad estaba implicado o era consciente de la trama– es la pérdida de 6 puntos, hecho que situaría al club de Zorilla en descenso, ocupando la plaza del Girona.
El problema revelado este lunes, sin embargo, es que el juez Ángel de Pedro no considera que el Girona sea parte perjudicada. El motivo: estima que no tiene "la calidad de ofendido por el delito al no ser el titular de la protección de la pureza de la competición", o dicho de otra manera, que no es nadie para señalar y solicitar castigos para los autores del delito. Un delito que, en cualquier caso, es evidente que existe.