El Barça ha superado el Girona en un derbi catalán memorable (0-2). El partido ha tenido de todo: ambiente festivo, ocasiones para ambos equipos, tensión, agresividad y, como no podía ser de otra manera, la intervención del mejor del mundo. El duelo de Montilivi -que por suerte no se ha disputado en Miami- ha servido para corroborar dos cosas. La primera, que el Girona es un equipo con una mentalidad de hierro que no se rinde nunca. La segunda, que mientras Leo Messi vista de blaugrana, el Barça seguirá ganando muchas ligas.

Semedo se estrena y el Girona tira de orgullo

El Girona ha empezado el partido siguiendo la misma estrategia utilizada en el Santiago Bernabéu: ser valiente. En la casa blanca su personalidad se tradujo en un gol inicial del Choco, pero contra el Barça las cosas no son tan sencillas.

Sólo se habían disputado 9 minutos de juego cuando Nélson Semedo ha aprovechado una pelota muerta en el área rojiblanca para marcar el primer gol del Barça. Mientras el l lateral portugués celebraba su primera diana con la camiseta blaugrana, el Girona lamentaba su falta de contundencia defensiva.

semedo gol girona barça lliga @FCBarcelona

FC Barcelona

El primer puñetazo del Barça no ha tumbado al equipo de Eusebio y tampoco los ánimos de Montilivi, que en esta ocasión se ha vestido de gala para recibir al líder de la Liga. Así, sólo cinco minutos después del gol de Semedo Pedro Alcalá ha disfrutado de una ocasión de oro para conseguir el empate. Àlex Granell –el mejor de su equipo– ha colgado una pelota en el corazón del área de Ter Stegen y el central ha rematado desviado por muy poco.

El aviso gerundense ha servido de advertencia al Barça. Si quería llevarse el derbi catalán, debería marcar más de un gol. Y para conseguir goles, nadie como Messi. El argentino ha regalado una asistencia en profundidad a Coutinho, pero el brasileño –nefasto un día más– ha perdonado en el uno contra uno ante Yassine Bono. No sería la única ocasión blaugrana. En el minuto 23, el astro argentino ha hecho levantar Montilivi con un disparo desde fuera el área que ha rozado la escuadra derecha de la portería gerundense.

A partir de este instante, la teórica hermandad entre los dos clubes –si es que ha existido en algún momento– ha pasado a mejor vida. Bernardo ha sido el primero en ver la tarjeta amarilla, pero después Lenglet, Busquets y Arturo Vidal también han sido amonestados por entradas bastante agresivas. Especialmente dura ha sido la del chileno, que ha puesto su bota a la altura de la cara de Granell.

Y en medio de la batalla, el Girona ha vuelto a perdonar. Cristhian Stuani se ha plantado en el interior del área del Barça y ha intentado batir Ter Stegen con un disparo cruzado. El portero ha podido desviar el tiro con su pierna, pero el rechazo lo ha cazado Pere Pons. Montilivi ya cantaba el gol del de Sant Martí Vell, pero Piqué, providencial, ha despejado la pelota bajo la línea de gol.

El mejor del mundo también moja en Montilivi

El segundo tiempo ha empezado tal como había acabado el primero, es decir, con una ocasión de Stuani. El pichichi rojiblanco ha intentado batir Tr Stegen con un dispar potente desde el lado derecho del área, pero el portero alemán le ha vuelto a ganar la partida.

Y entonces, cambio de guión: Bernardo Espinosa, que ya tenía una amarilla, se ha llevado por delante a Luis Suárez en un contraataque blaugrna y ha sido expulsado. Montilivi ha entrado en ebullición, y es que la amarilla mostrada por Gónzalez Fuertes ha sido cuando menos, rigurosa.

messi girona barça lliga efe

EFE

El fervor de la gradería y el orgullo del equipo de Eusebio ha permitido que los rojiblancos, durante unos minutos, jugaran mejor que con once jugadores. Así, Stuani y Aleix Garcia han vuelto a contar con ocasiones de gol, pero el empate no ha llegado y el Barça se ha agigantado. El espejismo pronto acabaría.

En el minuto 57 Arthur ha sustituido Arturo Vidal y los hombres de Ernesto Valverde han empezado a dominar el partido. Diez minutos después, el de siempre, ha sentenciado el choque. Jordi Alba se ha desmarcado en profundidad y ha regalado una nueva asistencia a Leo Messi, que con todo el tiempo del mundo para pensar, ha superado Bono con una sutil vaselina. Messi firmaba así su decimonoveno gol en la Liga, el primero en Montilivi desde que el Girona juega a primera.

A partir de este momento, Barça y Girona han empezado a pensar en sus respectivos partidos de Copa, que tendrán lugar el miércoles y jueves. Blaugranas y rojiblancos necesitarán dos goles para remontar las eliminatorias contra Sevilla y Real Madrid, y eso se ha notado en la intensidad del partido. Messi ha vuelto a contar con una buena ocasión para hacer el tercero, pero en esta ocasión Bono ha estado certero.

El Barça mantiene la distancia de cinco puntos sobre su inmediato perseguidor, el Atlético de Madrid, y además consigue un récord esperanzador. Los blaugrana suman 8 victorias consecutivas en la Liga, la mejor racha desde que Ernesto Valverde es el entrenador del equipo. La otra cara de la moneda es el Girona. Aunque el juego de los rojiblancos no es malo, ya son ocho las jornadas las que acumulan sin ganar. Las sensaciones son positivas pero la situación en la clasificación no. Con 24 puntos, el Girona es decimotercero y la zona de descenso está cada vez más cerca.