Ilkay Gündogan, que llegó al FC Barcelona la temporada pasada como uno de los fichajes más ilusionantes, ha decidido poner fin a su etapa en el club blaugrana. El centrocampista alemán ha comunicado tanto al cuerpo técnico como a la dirección deportiva su voluntad de marcharse antes de que cierre el mercado de verano.
Hansi Flick, el nuevo entrenador del Barça, ha dado su visto bueno a la salida de Gündogan, consciente de que en su posición hay un exceso de talento joven y prometedor, como Fermín, Pedri, Dani Olmo y Pablo Torre.
Gündogan, en la rampa de salida
Deco, el director deportivo del Barça, está moviendo fichas rápidamente. Sabe que la salida de Gündogan no solo aligeraría la competencia en el mediocampo, sino que también supondría un alivio significativo en la masa salarial del club, una cuestión crítica en estos momentos. El objetivo de Deco es conseguir al menos 20 millones de euros por el traspaso del jugador, una cifra que podría ser clave para las finanzas del club y para facilitar nuevas incorporaciones o la inscripción de jugadores aún pendientes.

La situación de Gündogan en el Barça ha sido tensa en los últimos meses. Aunque fue uno de los jugadores más destacados durante la pasada temporada, la proximidad de su 34 cumpleaños y la fuerte competencia en su posición han llevado al club a considerar su salida como una opción viable. Además, aunque el entorno del jugador ha insistido en que está a gusto en Barcelona y que su intención era cumplir con su contrato, las ofertas tentadoras de Turquía y Arabia Saudí han cambiado el panorama.
En los últimos días, los acontecimientos han dado un giro inesperado. Justo antes del inicio de la temporada y del partido contra el Valencia en Mestalla, Gündogan quedó fuera de la lista de convocados. El club atribuyó su ausencia a problemas físicos, un golpe que sufrió durante el Trofeo Joan Gamper. Sin embargo, esta explicación parece ser solo una parte de la historia. La coincidencia con las negociaciones para su salida sugiere que el Barça ya está preparando su adiós.

Gündogan no tendrá problemas para encontrar un nuevo destino. Desde Turquía, el Galatasaray ha mostrado interés en el alemán durante años, y en los últimos días, el Fenerbahce, dirigido por José Mourinho, ha dejado claro que si se presenta la oportunidad, harán todo lo posible para fichar al centrocampista. Por su parte, varios clubes saudíes también han mantenido contacto regular con el entorno del jugador, sondeando su disposición para unirse a la lucrativa liga del país.
La decisión de Flick de dar el visto bueno a la salida de Gündogan no ha sorprendido a los más cercanos al equipo. El técnico alemán ha demostrado desde su llegada que no se deja influir por nombres o historiales, sino que se centra en el rendimiento y la adaptación a su estilo de juego. Con jóvenes talentos como Pedri, Gavi, Dani Olmo y Pablo Torre en la plantilla, Flick confía en que el Barça puede seguir siendo competitivo sin la presencia de Gündogan.
Para Deco y Joan Laporta, la venta de Gündogan representa una oportunidad no solo de obtener una suma importante de dinero, sino también de liberar espacio en la plantilla y el presupuesto para futuros movimientos. Con el cierre del mercado cada vez más cerca, el Barça está preparado para un final de verano agitado, en el que la salida de Gündogan podría ser solo el primer paso de una serie de movimientos estratégicos.