Gerard Martín fue una de las grandes noticias positivas para el FC Barcelona en la pasada temporada 2024-2025. En su primer curso con ficha del primer equipo, el lateral zurdo respondió con solvencia cuando Alejandro Balde estuvo de baja, ganándose la confianza del cuerpo técnico y dejando actuaciones destacadas, como su partido en la Champions League ante el Inter de Milán, donde demostró capacidad competitiva y madurez táctica.
Sin embargo, su continuidad en el club no está asegurada. En esta pretemporada, la irrupción del juvenil Jofre Torrents ha generado dudas en el cuerpo técnico respecto a quién debe ocupar el rol de recambio de Balde. Gerard, que hasta hace poco parecía consolidado en ese papel, podría salir del Barça este mismo mes de agosto si llega una oferta que se acerque a los 15 millones de euros, la cifra que el club ha fijado como mínimo para negociar.
Un perfil fiable, pero con competencia feroz
El caso de Gerard Martín refleja una dinámica habitual en el Barça: jóvenes que emergen con fuerza, pero que deben convivir con la constante llegada de nuevos talentos desde la cantera. A sus 21 años, Gerard ha mostrado ser un lateral disciplinado, tácticamente ordenado y con buen pie en salida de balón. No tiene el desborde de Balde ni la frescura de Torrents, pero sí una regularidad que ha gustado a técnicos y analistas.
Sin embargo, Hansi Flick quiere un equipo dinámico, con laterales que puedan desbordar y generar superioridades constantes en campo contrario. Torrents, en ese sentido, parece encajar mejor en esa idea de juego. Por eso, aunque Gerard es valorado internamente, su salida no se descarta. Desde Inglaterra, varios equipos de mitad de tabla de la Premier League han preguntado por él, y el Barça ve con buenos ojos una venta si se respeta su valoración.
Una venta estratégica en clave económica
En el contexto económico actual del club, desprenderse de un jugador formado en La Masia representa una plusvalía inmediata en las cuentas, algo especialmente valorado por la directiva de Joan Laporta. Además, el hecho de que Balde sea titular indiscutible y que la cantera siga produciendo perfiles competitivos, facilita decisiones como esta sin comprometer la estructura deportiva del primer equipo.
La fórmula ideal para el club sería una venta con opción de recompra, como ya se ha hecho con otros canteranos en los últimos años. Se asegura así un retorno en caso de explosión del jugador, sin perder el control sobre su futuro. Gerard, por su parte, está abierto a salir si se le garantiza continuidad y minutos de calidad.
El futuro de Gerard Martín se decidirá en las próximas semanas, y si llega la oferta adecuada, el Barça no se opondrá a su salida.