Sergi Roberto está viviendo un renacer futbolístico en el Como, donde se ha convertido en una pieza clave desde su llegada. Sin embargo, una lesión en la rodilla le ha apartado de los terrenos de juego en las últimas jornadas, un revés que el equipo italiano ha sentido profundamente. Con él al mando, el Como logró abandonar los puestos de descenso en la Serie A gracias a su visión, capacidad de pase y liderazgo. Su ausencia, en cambio, ha coincidido con una racha negativa que ha devuelto al equipo a la zona baja de la tabla.
A pesar de su inactividad reciente, los números de Sergi Roberto han sido impresionantes. En 528 minutos de juego, no ha perdido ni un solo balón, un récord que ningún otro centrocampista de las grandes ligas europeas puede igualar. Además, su porcentaje de acierto en los pases, un 91,4 %, lo coloca como el mejor mediocampista de la Serie A en esta categoría. Estas cifras no han pasado desapercibidas para García Pimienta, técnico del Sevilla, quien conoce bien al catalán desde su etapa en el filial del FC Barcelona y no se rinde en su intención de incorporarlo a su equipo.
El pasado verano, García Pimienta hizo todo lo posible para que Sergi Roberto recalara en el Sevilla, pero el mediocampista optó por aceptar la propuesta del Como, seducido por el proyecto liderado por su amigo y excompañero Cesc Fàbregas. Según fuentes cercanas al club andaluz, el dinero no fue un impedimento, sino motivos familiares los que inclinaron la balanza hacia Italia.
Ahora, viendo el impacto inmediato que tuvo en su nuevo equipo antes de la lesión, el Sevilla lamenta profundamente no haber conseguido el fichaje del de Reus. En un mediocampo que ha sufrido bajas importantes a lo largo de la temporada, su perfil de jugador ordenado, con experiencia y con capacidad para liderar, habría encajado perfectamente.
A pesar del rechazo inicial, García Pimienta no pierde la esperanza de llevar a Sergi Roberto al Sevilla, y más aún teniendo en cuenta la conexión que ambos compartieron en sus días en el Barça B. La idea de reunirlo con jugadores como Saúl Ñíguez, que recientemente se ha recuperado de una lesión muscular, es un sueño que el técnico sigue persiguiendo.
Por su parte, Cesc Fàbregas no quiere ni imaginarse perdiendo a su principal bastión en el mediocampo. En cuanto el catalán esté recuperado, se espera que vuelva a ser el motor del equipo italiano. Sin embargo, con el mercado de enero a la vuelta de la esquina y los rumores en aumento, la posibilidad de que Sergi Roberto cambie de aires y se reúna con García Pimienta no está descartada.