Hansi Flick considera a Frenkie De Jong como una pieza irremplazable en su proyecto y ya ha trasladado su postura a la dirección del club. El mensaje ha sido claro: hay que renovar a De Jong cuanto antes.
De Jong acaba contrato en junio de 2026. Aunque aún queda margen, en el Barça ya han comenzado los movimientos para evitar repetir errores del pasado. Flick no quiere incertidumbre alrededor de una figura tan determinante en el equilibrio del equipo, y por ello ha pedido al presidente Joan Laporta que se priorice su renovación.

De Jong, una pieza fundamental
Durante la temporada, Flick ha probado distintas fórmulas en la medular, pero en todas ellas el papel de Frenkie de Jong ha sido esencial. Ya sea como único pivote, acompañado por Gavi o Pedri, o incluso como interior con libertad de movimientos, el neerlandés ha respondido con solvencia y liderazgo.
Su capacidad para conducir el balón, su lectura táctica, su despliegue físico y su personalidad en momentos complicados lo han consolidado como el motor del centro del campo. Flick, gran admirador del estilo de juego de posesión, ve en De Jong al perfecto engranaje para su sistema.
Además, la versatilidad de Frenkie le permite adaptarse a distintos contextos de partido, aportando equilibrio defensivo cuando el equipo lo necesita o acelerando el juego en campo rival cuando toca arriesgar.
Renovación estratégica
El entorno del jugador siempre ha sido claro: Frenkie se siente feliz en Barcelona, tanto a nivel personal como deportivo. Pero también tiene claro que su próxima renovación deberá estar a la altura de su importancia en el equipo. El Barça, por su parte, debe manejar con cuidado una situación contractual que afecta tanto a su estabilidad financiera como a su proyecto deportivo.
Por eso, el hecho de que Flick haya intervenido personalmente para acelerar el proceso puede marcar la diferencia. Su confianza total en el jugador ha sido bien recibida por el vestuario, y ha generado también tranquilidad en el entorno del futbolista.

La intención es sentarse con los representantes del neerlandés antes del inicio de la próxima temporada, con la intención de ampliar el contrato hasta 2029 y ajustar sus condiciones salariales, teniendo en cuenta el contexto actual del club y el fair play financiero de LaLiga.
Un mensaje para el futuro
Flick sabe que mantener a sus jugadores clave es la base de cualquier proyecto exitoso. Y De Jong lo es. Su rendimiento ha sido constante incluso en una temporada compleja, con lesiones, altibajos en resultados y cambios de entrenador. Su liderazgo en el campo ha sido incuestionable.
El técnico alemán ha dejado claro que construirá el equipo alrededor de Frenkie, y que perderlo sería un golpe estructural que el Barça no se puede permitir. Su renovación no solo es un asunto contractual, sino también un mensaje: el Barça quiere seguir compitiendo con los mejores, y para eso necesita a sus mejores futbolistas.
Ahora, la pelota está en el tejado de la directiva. Flick ha marcado la prioridad. Laporta ha tomado nota. Y Frenkie espera, sabiendo que es insustituible.