Hansi Flick ya ha empezado a perfilar el nuevo Barça de la temporada 2025-26, y uno de los cambios más significativos que plantea el técnico alemán afecta directamente a Raphinha. Flick lo considera intocable y tiene en mente un nuevo rol para el brasileño que encaja con el posible fichaje estrella del verano: Luis Díaz.
El técnico tiene claro el esquema ofensivo que quiere implantar. Su tridente ideal estaría formado por Luis Díaz en la izquierda, Robert Lewandowski como delantero centro y Lamine Yamal en la derecha. Un trío explosivo, versátil y con capacidad para desequilibrar en cualquier momento. Pero esa configuración dejaba a Raphinha aparentemente sin sitio. O eso se pensaba.
Flick, sin embargo, tiene un plan para el brasileño: reconvertirlo en mediapunta.

Raphinha, por dentro y con galones
Flick cree que Raphinha puede ser una pieza clave jugando por detrás del delantero, en una posición que le permita moverse con libertad, presionar en primera línea y participar en la creación. En ese esquema, el brasileño actuaría por delante de Frenkie de Jong y Pedri, ocupando el centro del ataque en una especie de 4-2-3-1.
Flick valora especialmente la intensidad y capacidad de presión de Raphinha, además de su lectura táctica. A pesar de que ha brillado más por banda, el ex del Leeds ya ha demostrado en varios partidos su inteligencia para moverse entre líneas, su buen disparo desde la frontal y su compromiso defensivo. En un equipo que buscará morder arriba y recuperar rápido el balón, esas cualidades se consideran fundamentales.
Luis Díaz, la pieza que lo cambia todo
El posible fichaje de Luis Díaz por el Barça está muy avanzado, gracias al deseo del colombiano de vestir de blaugrana y a la presión que está ejerciendo para salir del Liverpool por una cifra cercana a los 40 millones de euros, muy por debajo de los 80 que inicialmente pedía el club inglés. La llegada de Díaz obligaría a reorganizar el frente de ataque, pero Flick no está dispuesto a renunciar a Raphinha.
El técnico cree que ambos pueden convivir perfectamente en el once inicial. Mientras Díaz aportaría desborde y gol desde la izquierda, Raphinha sería ese enlace entre líneas que presione, recupere y conecte con los extremos y el punta. De hecho, en el cuerpo técnico consideran que el brasileño puede ofrecer un rendimiento aún más alto en esa posición, menos encasillada y con más contacto con el balón.

Una decisión firme
Flick ya ha transmitido su decisión a la dirección deportiva: Raphinha es intocable. El brasileño, que renovó hace pocos días y ha reiterado públicamente su deseo de quedarse en el Barça, será un jugador importante en el nuevo proyecto. Pese a que había interés desde la Premier League y Arabia Saudí, especialmente por su rendimiento creciente en los últimos meses, la puerta de salida queda cerrada.
Así, con Luis Díaz como objetivo prioritario, Raphinha con nuevo rol y Lewandowski y Lamine como fijos, Flick ya empieza a moldear una delantera que promete velocidad, presión, talento y mucho gol. Un Barça ofensivo, con roles definidos y donde cada pieza empieza a encajar.