Hansi Flick ya está planificando la próxima temporada al mando del FC Barcelona, y una de sus prioridades no tiene que ver con fichajes, sino con asegurar la continuidad de uno de sus jugadores clave: Frenkie de Jong. El técnico alemán ha sido claro con la directiva y, especialmente, con Joan Laporta: quiere que la renovación del centrocampista neerlandés quede cerrada antes del inicio de la pretemporada, prevista para mediados de julio.
De Jong, esencial para Flick
Desde su llegada al banquillo culé, Flick ha depositado su plena confianza en De Jong. Lo considera un pilar fundamental en la estructura del equipo, tanto por su calidad técnica como por su capacidad para equilibrar el centro del campo. El entrenador alemán valora la inteligencia táctica del jugador, su buena salida de balón y su versatilidad para jugar como pivote o interior, lo que le permite ajustar distintas variantes según el rival o el contexto del partido.
Por todo ello, Flick ha insistido en que su proyecto deportivo pasa por mantener a De Jong en el equipo. No quiere incertidumbres cuando comience la preparación del curso 2025-26 y por eso ha pedido a la cúpula directiva que priorice este asunto. En el club son conscientes de que la renovación del neerlandés está estancada y que su contrato actual finaliza en junio de 2026, lo que empieza a generar cierta urgencia.
Laporta, presionado para acelerar la renovación
Joan Laporta siempre ha tenido una relación cordial con De Jong, aunque no exenta de tensiones en momentos clave, especialmente en lo relacionado con su salario. El neerlandés es uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla y eso ha sido un escollo en anteriores negociaciones.
Sin embargo, ahora el escenario ha cambiado. Flick ha elevado la importancia de De Jong, y su continuidad ha pasado a ser estratégica también para la dirección deportiva. Deco ya trabaja en una propuesta que permita ajustar el salario del jugador a la realidad económica del club, pero manteniendo unas condiciones competitivas que convenzan al futbolista.
¿Un interés exterior que complica todo?
A pesar de que De Jong ha reiterado su deseo de seguir, en el club temen que pueda recibir ofertas de equipos como el Inter de Milán, especialmente si Cesc Fàbregas acaba asumiendo el cargo de entrenador en el conjunto italiano. Cesc tiene en alta estima al centrocampista neerlandés y podría intentar convencerle para que encabece su proyecto si se concreta su llegada al banquillo ‘nerazzurro’.
Por eso, Flick ha sido tajante: no quiere sorpresas en agosto. La renovación de Frenkie debe cerrarse en las próximas semanas, y ese será uno de los principales retos de Laporta antes del inicio de la pretemporada. El futuro del Barça pasa por la estabilidad, y Frenkie de Jong es pieza clave en el tablero de Flick.